PEKÍN (Reuters) – La actividad de servicios de China se expandió al ritmo más rápido en tres meses en octubre, ayudada por los primeros signos de que el gran impulso de estímulo de Pekín estaba ayudando a mejorar las condiciones comerciales, mostró una encuesta del sector privado el martes.
El índice de gerentes de compras (PMI) de servicios Caixin/S&P Global creció a 52.0 en octubre desde 50.3 el mes anterior. El nivel 50 separa la expansión de la contracción de forma mensual.
Eso coincidió con el PMI oficial publicado la semana pasada, que mostró que la actividad no manufacturera, incluidos los servicios y la construcción, volvió a la expansión.
La economía de China creció al ritmo más lento desde principios de 2023 en el tercer trimestre, con el sector inmobiliario golpeado por la crisis mostrando pocas señales de estabilización mientras Pekín se apresura a alcanzar su objetivo de crecimiento de este año.
Pekín desató medidas de estímulo monetario y apoyo al sector inmobiliario en septiembre. Poco después, una reunión de los principales líderes del Partido Comunista, el Politburó, prometió el “gasto necesario” para devolver el crecimiento a la senda correcta.
La encuesta mostró que los nuevos negocios aumentaron marginalmente a 52.1 desde 51.0 en septiembre. Sin embargo, la expansión de los flujos de nuevos negocios desde el extranjero disminuyó.
Se percibieron presiones de capacidad a medida que los nuevos negocios se sumaron al trabajo pendiente. Como resultado, los proveedores de servicios aumentaron su empleo por segundo mes consecutivo.
El crecimiento de los precios de los insumos se redujo a un mínimo de tres meses, aunque las empresas siguen lidiando con el aumento de los costos de materiales y energía.
La confianza general aumentó al nivel más alto en cinco meses, con algunas empresas aumentando los esfuerzos promocionales para respaldar el crecimiento de las ventas en el próximo año.
Junto con el PMI manufacturero, el PMI compuesto Caixin/S&P Global subió a 51.9 desde 50.3 en septiembre.
Las cifras recientes apuntaron a una mayor presión deflacionaria, un crecimiento más suave de las exportaciones y una demanda de préstamos moderada, señales de alerta para una recuperación económica.
“Lograr el objetivo de crecimiento de China en 2024 dependerá de una recuperación sostenida en la demanda de los consumidores. Eso significa que los esfuerzos políticos deberían centrarse en aumentar el ingreso disponible de los hogares”, dijo Wang Zhe, Economista Senior de Caixin Insight Group.
(Reporte de Liangping Gao y Ryan Woo; Edición de Sam Holmes)