El fiscal especial Jack Smith ha pedido a un juez que desestime el caso de interferencia en las elecciones federales contra Donald Trump, ya que está a punto de convertirse en el próximo presidente de Estados Unidos. En nuevos documentos presentados el lunes, Smith dijo al juez que el caso debería cerrarse debido a la política del Departamento de Justicia que prohíbe la persecución de un presidente en funciones. Trump se declaró no culpable de conspiración para defraudar a los EE. UU. y otros cargos relacionados con sus esfuerzos por revertir su derrota en las elecciones de 2020 ante el presidente Joe Biden. “Como resultado de las elecciones celebradas el 5 de noviembre de 2024, el acusado, Donald J. Trump, será investido como presidente el 20 de enero de 2025”, escribió Smith en la nueva presentación. “Ha sido durante mucho tiempo la posición del Departamento de Justicia que la Constitución de los Estados Unidos prohíbe la acusación federal y la posterior persecución penal de un presidente en funciones.” “Este resultado no se basa en los méritos o la fortaleza del caso contra el acusado”, agregó Smith en la presentación de seis páginas. En un comunicado, el equipo de Trump dijo que la decisión de poner fin al caso fue “una gran victoria para el estado de derecho”. “El pueblo estadounidense reeligió al presidente Trump con un mandato abrumador para Hacer América Grande Otra Vez”, dijo el portavoz de Trump, Steven Cheung. “El pueblo estadounidense y el presidente Trump quieren poner fin inmediato a la politización de nuestro sistema judicial y esperamos unir a nuestro país.” La solicitud de desestimar el caso de subversión electoral de Trump marca el fin de una larga saga legal después de que Smith tuviera que volver a presentar cargos contra el presidente basándose en un fallo de la Corte Suprema que encontró que Trump tenía inmunidad parcial a la persecución. El regreso de Trump a la Casa Blanca ha dejado varios de los casos penales en su contra en el limbo. Su sentencia por su condena penal en el estado de Nueva York ha sido indefinidamente aplazada, mientras que otro caso federal relacionado con su manejo de documentos clasificados también es probable que se desestime al asumir el cargo. El caso de subversión electoral de Smith contra Trump también enfrentó desafíos. El fiscal tuvo que revisar los cargos contra el ex presidente después de que la Corte Suprema dictaminara en julio que Trump estaba protegido de la persecución por “actos oficiales” que tuvieron lugar mientras estaba en la Casa Blanca. Smith argumentó en una acusación revisada que los esfuerzos de Trump por revertir los resultados de las elecciones de 2020 estaban relacionados con su campaña y, por lo tanto, no eran actos oficiales. Cuando Trump ganó las elecciones de 2024 este mes, Smith comenzó a tomar medidas para cerrar tanto el caso de interferencia en las elecciones como el caso de documentos clasificados, en el que Trump fue acusado de almacenar archivos sensibles en su resort Mar-a-Lago en Florida y obstaculizar los esfuerzos del gobierno para recuperarlos. Trump se ha comprometido a deshacerse de Smith tan pronto como asuma el cargo. Smith ha dicho que planea renunciar el próximo año. Dado que Trump ha ganado la presidencia, “sus problemas penales desaparecen”, dijo el ex fiscal federal Neama Rahmani. “Está bien establecido que un presidente en funciones no puede ser procesado”, dijo. Trump también enfrenta cargos estatales en Georgia por sus intentos de revertir los resultados electorales allí, pero ese caso también enfrenta retrasos. Un tribunal de apelaciones está considerando si anular una decisión anterior que permitió a la fiscal del condado de Fulton, Fani Willis, seguir en el caso a pesar de una relación que tuvo con un fiscal que contrató.
