Las fuerzas israelíes han registrado las oficinas del canal de noticias Al Jazeera en Ramallah, en Cisjordania ocupada, y le han ordenado cerrar por un período inicial de 45 días. Soldados israelíes armados y enmascarados entraron en el edificio temprano el domingo durante una transmisión en vivo. Los espectadores vieron cómo las tropas entregaban la orden de cierre al jefe de la oficina de Al Jazeera en Cisjordania, Walid al-Omari, quien la leyó en vivo en el aire. Israel registró las oficinas de Al Jazeera en Nazaret y Jerusalén Este ocupada en mayo, habiendo descrito al canal con sede en Qatar como una amenaza para la seguridad nacional. “Apuntar a los periodistas de esta manera siempre tiene como objetivo borrar la verdad y evitar que la gente escuche la verdad”, dijo Omari en comentarios reportados por su empleador. Los soldados confiscaron el último micrófono y cámara de la calle afuera y obligaron a Omari a salir de la oficina, dijo el periodista de Al Jazeera Mohammad Alsaafin. Alsaafin, al publicar sobre la redada en redes sociales, dijo que las tropas también derribaron un póster de Shireen Abu Aqla, una reportera de Al Jazeera que fue asesinada mientras cubría una redada de las fuerzas israelíes en Cisjordania. La red y testigos en ese momento dijeron que la reportera palestino-estadounidense fue disparada por las fuerzas israelíes. Israel argumentó inicialmente que había sido disparada por un palestino, sin embargo, meses después concluyó que había una “alta probabilidad” de que uno de sus soldados la hubiera matado. Las relaciones entre el canal propiedad de Qatar y el gobierno israelí han sido tensas durante mucho tiempo, pero han empeorado drásticamente tras el estallido de la guerra en Gaza. Con los periodistas extranjeros prohibidos de ingresar a la franja, el personal de Al Jazeera con base en la zona ha sido uno de los pocos reporteros capaces de cubrir la guerra en el terreno. Israel ha etiquetado repetidamente al canal como un portavoz terrorista, acusación que Al Jazeera ha negado. En abril, el parlamento israelí aprobó una ley que otorga al gobierno el poder de cerrar temporalmente a los canales extranjeros considerados una amenaza para la seguridad nacional durante la guerra. La prohibición estaría vigente por un período de 45 días a la vez, como se vio en la redada del domingo, y puede ser renovada. A principios de mayo, las oficinas de Al Jazeera en Nazaret y Jerusalén Este ocupada fueron objeto de redadas separadas. Israel aún no ha comentado sobre la operación del domingo.
