El presidente Biden y los líderes de Egipto y Qatar dijeron el jueves que estaban preparados para presentar una propuesta de alto el fuego “final” para poner fin a la guerra en Gaza y pidieron a Israel y Hamas que vuelvan a la mesa de negociaciones la próxima semana para resolver el conflicto.
En una declaración conjunta, el Sr. Biden, junto con el presidente Abdel Fattah el-Sisi de Egipto y el jeque Tamim bin Hamad al-Thani de Qatar, declararon que “ha llegado el momento” de concluir el acuerdo de alto el fuego y la liberación de rehenes secuestrados en Gaza y detenidos palestinos retenidos por Israel. Insistieron en que los negociadores se reúnan en El Cairo o Doha, Qatar, el próximo jueves.
“No hay más tiempo que perder ni excusas de ninguna parte para más retrasos”, dijeron los tres líderes en la declaración. “Es hora de liberar a los rehenes, comenzar el alto el fuego e implementar este acuerdo. Como mediadores, si es necesario, estamos preparados para presentar una propuesta de puente final que resuelva los problemas restantes de implementación de una manera que cumpla con las expectativas de todas las partes”.
Las conversaciones de alto el fuego se han detenido después de que una reunión el fin de semana pasado en El Cairo no produjera avances, y el proceso se complicó con el asesinato de Ismail Haniyeh, el líder político de Hamas, que había estado liderando las negociaciones a través de intermediarios. El Sr. Biden ha expresado frustración por la decisión de Israel de llevar a cabo la operación que mató al Sr. Haniyeh en Irán en un momento en que el presidente había esperado que las conversaciones de alto el fuego estuvieran cerca del éxito.
El primer ministro Benjamin Netanyahu de Israel indicó minutos después de la declaración conjunta del Sr. Biden y los otros líderes que estaría de acuerdo con la reunión. “A raíz de la oferta de Estados Unidos y los mediadores, Israel enviará la delegación negociadora el 15 de agosto al lugar que se decida, para acordar los detalles de la implementación del acuerdo marco”, dijo su oficina en un comunicado.
Pero no está claro cuán dispuesto está el Sr. Netanyahu a llegar a un acuerdo. Sus propios funcionarios de seguridad se han quejado en privado de que el primer ministro está retrasando las conversaciones al reintroducir una demanda que había sido suavizada por sus negociadores. El primer ministro, a su vez, ha acusado a sus funcionarios de seguridad de ser malos negociadores.
Tampoco está claro si Hamas está listo o es capaz de llegar a un acuerdo. El grupo no respondió de inmediato a la declaración conjunta del Sr. Biden y los demás, y seguía siendo incierto quién se presentaría a las negociaciones ahora que el Sr. Haniyeh está muerto incluso si el grupo vuelve a la mesa.
Hamas nombró a Yahya Sinwar, uno de los arquitectos de los mortales ataques del 7 de octubre contra Israel, para reemplazar al Sr. Haniyeh, pero se cree que está escondido en Gaza y no es fácil ni rápido contactarlo a través de intermediarios. Incluso cuando el Sr. Haniyeh estaba vivo, se decía que el Sr. Sinwar era quien tomaba las decisiones desde su santuario, y nadie espera que aparezca públicamente.
Un alto funcionario de la administración Biden dijo que la declaración conjunta surgió de las discusiones de esta semana entre el presidente, el Sr. el-Sisi y el Sr. al-Thani. El funcionario no describió cómo sería una “propuesta de puente final”, pero dijo que el acuerdo marco que ya estaba sobre la mesa podría finalizarse, con algunas concesiones en los detalles, como la secuencia de liberaciones de rehenes y prisioneros.
El funcionario, que informó a los periodistas bajo condición de anonimato para discutir negociaciones sensibles, dijo que había cuatro o cinco problemas que necesitaban resolverse para completar el acuerdo de alto el fuego, y agregó que podrían ser manejados si hubiera suficiente voluntad en ambas partes. Pero advirtió que la reunión del próximo jueves, si se llevaba a cabo, solo reanudaría el proceso de negociación y advirtió contra esperar que el acuerdo se cerrara ese día.
En una declaración propia, un organismo israelí que representa a las familias de muchos de los secuestrados por Hamas durante los ataques del 7 de octubre agradeció la llamada del Sr. Biden y los demás líderes. Según las autoridades israelíes, alrededor de 115 rehenes permanecen en Gaza.
“Esta reciente declaración reafirma lo que hemos sabido durante mucho tiempo: un acuerdo es el único camino para traer a casa a todos los rehenes”, dijo el Foro de Familias de Rehenes y Desaparecidos. “El tiempo se agota. Los rehenes no tienen más tiempo que perder. ¡Un acuerdo debe firmarse ya!”
El impulso liderado por Estados Unidos para renovar las conversaciones llega en un momento de alta tensión en la región debido al asesinato del Sr. Haniyeh en Teherán y de un alto cargo de Hezbollah en Líbano. Tanto Hezbollah como Irán han prometido vengarse de Israel, y Estados Unidos ha ordenado el despliegue de más buques de guerra y aviones a la región para ayudar a defender a su aliado contra tales ataques.
El Sr. Biden se reunió en el Despacho Oval el jueves con el secretario de Defensa Lloyd J. Austin III y otros funcionarios para revisar las preparaciones militares, y su equipo reiteró la determinación de Estados Unidos de apoyar a Israel. Al mismo tiempo, el Sr. Biden y sus asesores han instado a Israel a pensárselo dos veces antes de llevar a cabo una contraofensiva expansiva que podría escalar en una guerra regional.
El Sr. Austin dijo que había llamado a Yoav Gallant, el ministro de Defensa israelí, el jueves para “reforzar mi apoyo inquebrantable” contra cualquier ataque. “Los F-22 Raptors de EE. UU. que llegaron a la región hoy representan uno de los muchos esfuerzos para disuadir la agresión, defender a Israel y proteger a las fuerzas estadounidenses en la región”, escribió el Sr. Austin en redes sociales. “También subrayé la importancia de concluir un acuerdo de alto el fuego en Gaza que libere a los rehenes”.
Los funcionarios estadounidenses en los últimos días han expresado un optimismo tentativo de que cualquier acción tomada por cualquiera de las partes aún pueda ser relativamente medida, lo que permitiría a varios actores salvar la cara sin desencadenar un conflicto más explosivo. Pero si eso no se cumple, podría hacer que cualquier regreso a la mesa de negociaciones la próxima semana sea problemático, al menos.