Estudiantes de realities, ¡prestad atención, porque el género finalmente ha llegado a su punto lógico. En retrospectiva, siempre fue cuestión de cuándo, no de si, una compañía de producción presentaría una serie titulada Isla Virgen, pero ahora, finalmente, el día está sobre nosotros.
Según Variety, Hulu acaba de lanzar Virgin Island, un programa que es exactamente lo que piensas. Una isla tropical. Un montón de vírgenes. Lujuria. Tentación. Probablemente algún tipo de torpe, desesperado y temeroso acto sexual. Casi definitivamente mucho llanto después. ¡Este podría ser el programa para el que se inventó tu televisión!
A lo largo de 10 episodios, Virgin Island reunirá a un grupo de “solteros impresionantemente atractivos y seguros de sí mismos”. Según Hulu: “A medida que el elenco encuentra conexiones sinceras y explora sus diferentes razones para esperar, habrá un montón de giros inesperados, incluyendo nuevas llegadas y partidas, todo culminando en un dramático final donde las relaciones incipientes serán puestas a prueba”. Esto es pura conjetura por mi parte, pero interpreto que ese último fragmento significa que el final presentará a dos personas intentando tener sexo por primera vez mientras sus parientes mayores y devotamente religiosos los observan desde el rincón de la habitación. ¿Lograrán nuestros concursantes llegar al punto del clímax sexual a pesar del sonido de sus abuelos llorando con amarga decepción? ¡Sintoniza Virgin Island y descúbrelo!
Claramente, hay varias preguntas que hacer aquí. La primera, y quizás la más apremiante es: “¿Qué tipo de vírgenes están buscando estas personas de todos modos?” Esto es importante, porque influirá directamente en la dirección de la serie. Si se trata de adultos que han tomado la decisión de abstenerse de tener relaciones sexuales, entonces podría ser una televisión fascinante. Quizás todos tengan que superar un largo temor a la intimidad física, en cuyo caso el programa tiene el potencial de ser una exploración sensible y profunda de los obstáculos que elegimos poner en el camino de nuestra propia felicidad.
Por otro lado, podría estar lleno de un tipo más tradicional de virgen; jóvenes que están absolutamente ansiosos por tener relaciones sexuales por primera vez. Esto haría que la serie fuera mucho más excitante, excepto que todos se acostarían con todos en cuanto pongan un pie en la isla, y la serie entera terminaría después de tres segundos.
La segunda pregunta es: “¿Cómo puedes estar seguro de que estas personas son vírgenes de todos modos?” Hasta ahora, el formulario de solicitud en línea hace preguntas como “¿Eres virgen?” y “Explica por qué sigues siendo virgen”, lo cual no parece ser un método particularmente científico para atraer solo vírgenes verificados. El sistema parece ser extremadamente fácil de manipular y, si bien definitivamente hay un reality show en el estilo de Traitors donde una persona sexualmente activa se infiltra en un grupo de vírgenes por puro interés personal, ese show no debería ser algo que se haga llamar Virgin Island.
Además, buena suerte encontrando solicitantes. Habrá una versión británica de Virgin Island en el Reino Unido, titulada Intimacy Retreat, y Channel 4 ya ha tenido dificultades para encontrar a alguien que quiera participar. El proceso de solicitud comenzó el verano pasado y sin embargo, en enero se informó que no había una sola persona interesada en participar. Sacudido por la crisis, en marzo el canal flexibilizó los requisitos de entrada para permitir no vírgenes. Quizás eso signifique personas que son célibes. Quizás signifique personas que nunca han tenido relaciones sexuales completas. Quién sabe, pero el retroceso ciertamente se siente como una derrota.
Quizás la versión americana tenga más suerte, pero es difícil ver cómo. Es probable que el tipo de personas a las que apunta el programa consideren su virginidad como algo sagrado. Es posible que no quieran que el mundo sepa que han mantenido su virginidad. O tal vez han esperado tanto tiempo porque quieren que la pérdida eventual de su virginidad sea un evento significativo, en lugar de un mero momento comercial en el sexto episodio de un reality show con un título que suena como si lo hubiera creado un simio masturbándose.
Quizás me equivoque. Quizás América tenga suficientes buscadores de atención dispuestos a intercambiar su virginidad por tres meses de vaga notoriedad. Y si ese es el caso, tal vez Virgin Island se mantenga en el aire durante años. Pero si no lo hace, y el programa tiene dificultades para encontrar solicitantes, espero que recuerde que aún hay tiempo suficiente para ceder completamente al lado oscuro y rebrandearse como Incel Island.