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Los pasajeros fueron evacuados de un Airbus A330 de Delta a través de toboganes de emergencia después de un incendio en el motor en el aeropuerto de Orlando. No se reportaron heridos.
Crédito: X-@beckerkw
Lo que debía ser un vuelo rutinario desde Orlando a Atlanta se convirtió en una experiencia aterradora el lunes por la mañana cuando el motor de un avión de Delta se incendió justo antes de despegar.
Los pasajeros del vuelo 1213 tuvieron que ser evacuados utilizando toboganes de emergencia, justo allí en la pista del Aeropuerto Internacional de Orlando.
El incidente ocurrió alrededor de las 11:15 a.m., poco después de que el avión, un Airbus A330, retrocediera desde la puerta. Según la FAA, el fuego comenzó en el tubo de escape de uno de los motores, lo que provocó una acción inmediata por parte de la tripulación. A bordo se encontraban 282 pasajeros, junto con 10 asistentes de vuelo y dos pilotos.
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Afortunadamente, nadie resultó herido y el fuego fue rápidamente controlado por los equipos de emergencia que ya estaban estacionados en el aeropuerto.
Incendio en el motor de Delta: evacuación rápida y respuesta de seguridad de los pasajeros
Según Delta, en el momento en que se avistaron las llamas, la tripulación no tomó ningún riesgo. Se dio la orden de evacuación, se desplegaron los toboganes y en cuestión de minutos, todos estaban fuera del avión y de regreso en la terminal.
Los pasajeros estaban comprensiblemente sacudidos pero tranquilos, y no se reportaron heridos. Delta ha organizado un avión de reemplazo para llevar a todos a su destino en Atlanta, aunque con un retraso y una historia que probablemente no olvidarán pronto.
En un comunicado, la aerolínea se disculpó por el susto y elogió a los pasajeros por su cooperación: “Nada es más importante que la seguridad”, dijeron. “Nuestros equipos están trabajando para llevar a los clientes a sus destinos finales lo antes posible.”
Recientes incidentes de vuelos de Delta plantean preocupaciones sobre la seguridad de los pasajeros
No es la primera vez que Delta ha tenido que lidiar con una emergencia en los últimos meses. En febrero, un vuelo se volcó al aterrizar en Toronto, dejando 21 personas heridas. Un mes antes, en enero, otro vuelo de Delta abortó el despegue en Atlanta y los pasajeros tuvieron que deslizarse fuera del avión, al igual que hicieron esta semana.
La FAA ha iniciado una investigación sobre el incendio del lunes, y Delta dice que su equipo de mantenimiento también inspeccionará la aeronave.
Por ahora, lo más importante es que todos estén a salvo y que los sistemas en su lugar, desde la formación de la tripulación hasta la respuesta del aeropuerto, hicieron exactamente lo que se suponía que debían hacer. Aún así, la serie de incidentes recientes seguramente levantará algunas cejas, y los pasajeros estarán atentos para ver cómo responde Delta en el futuro.
Etiquetas: Avión, Delta Airlines
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