Una residencia ilegal británica en la región de Murcia ha sido expuesta después de que una mujer de 84 años- también británica y no nombrada- tuvo que ser llevada de urgencia al hospital.
Ella sufría de deshidratación extrema e insuficiencia renal en la residencia no autorizada ubicada en el pueblo de La Manchica en la zona de Cartagena.
La Pension Hakuna Matata-Rural Guest House es dirigida por Brian K y Susan K y ha estado operando desde 2018 e incluye el único bar en el pueblo, que en este momento está ‘temporalmente cerrado’.
Se dice que tiene hasta 34 residentes, todos británicos.
La pareja compró tres propiedades conectadas para establecer una casa de huéspedes y un bar, además de operar la residencia de ancianos bajo el nombre de ‘Casa Care’.
Un equipo de ambulancia descubrió a la víctima A.S. en su habitación, la cual se encontraba en un estado deplorable con gatos, basura, excrementos y orina de animales.
Una investigación del portal de noticias El Diario sobre las actividades en La Manchica incluyó testimonios de primera mano de un médico sobre las condiciones: “Es un lugar muy turbio y extraño, donde es común que atendamos a personas muy mayores con patologías graves que no deberían estar allí debido al estado de las habitaciones”.
Una enfermera le contó a El Diario lo que encontraron al visitar a A.S. “Era una habitación asquerosa, y dentro vimos a una anciana que ya no tiene un riñón, completamente descuidada, luchando con una deshidratación severa”.
“Estaba al borde de un coma y había sido ingresada en el hospital unos días antes por un fuerte golpe en la cabeza”.
La enfermera dice que se presentó una denuncia ante la Guardia Civil y la Policía Local de Cartagena, mientras que el médico ha contactado al departamento de Salud Pública.
Mientras tanto, A.S. está siendo atendida en una residencia de ancianos oficial.
‘Casa Care’ se promociona a través de su sitio web como una ‘residencia de ancianos y vida asistida’ que ofrece un ‘servicio de cuidado para usted y sus seres queridos’.
Ofrece una variedad de servicios que incluyen acceso a una enfermera ‘experimentada’ de 32 años que se cree que es Susan K.
Los precios- sin incluir el IVA- van desde €100 por 24 horas de cuidado hasta €2,000 por cuatro semanas según el sitio web.
Las autoridades locales, incluido el Ministerio de Política Social de Murcia, han confirmado que las instalaciones nunca han estado autorizadas para la atención médica o una residencia de ancianos.
Brian K le dijo a El Diario que la ‘residencia cerró hace 10 años’, pero se han publicado videos e imágenes de residentes ancianos en línea durante el último año.
Un hombre británico no nombrado de la zona comentó: “Es un lugar bastante extraño. El bar casi nunca está abierto”.
“Es el lugar perfecto para establecer una residencia sin licencia: está en medio de la nada, sin nadie que la supervise”, sugirió a El Diario.