La cadena hotelera con sede en Palma Meliá está comprando propiedades para alojar a trabajadores temporales que no pueden permitirse alquilar en los puntos calientes del turismo, ya que una crisis de vivienda está causando escasez de mano de obra en la industria turística del país, según su CEO Gabriel Escarrer.
Meliá, la cadena hotelera más grande de España, ha comprado un antiguo albergue en Menorca y está buscando hacer más adquisiciones en Ibiza y Mallorca, así como en las Islas Canarias y en la península española para albergar a su personal durante la temporada alta de verano, dijo Escarrer en una entrevista.
“Debido al auge de los alquileres a corto plazo para turistas, encontrar un apartamento para la temporada se ha convertido en una odisea”, dijo Escarrer, añadiendo que ya no es suficiente pagar bien a los empleados para retener el talento.
“Lo que hemos hecho es asegurarnos de que tenemos viviendas para nuestra fuerza laboral.”
Una crisis de vivienda en España causada por una fuerte caída en la construcción de nuevas viviendas desde el colapso del mercado inmobiliario en 2012 se ve exacerbada por un auge en los alquileres a corto plazo a turistas en plataformas como Airbnb.
España recibió un récord de 94 millones de turistas el año pasado, con tres de cada diez visitantes eligiendo quedarse en casas de vacaciones en lugar de hoteles, según datos oficiales.
Comprar viviendas es una solución radical para Meliá, que en los últimos dos años se ha visto obligada a alojar a parte de su personal en habitaciones de hotel para evitar que renuncien, dijo Escarrer.
Pero para muchos propietarios de hoteles, dar un hogar a los trabajadores no es una opción, dijo Ramón Estalella, director general del grupo hotelero CEHAT de España.
“No todos pueden permitirse (proporcionar) vivienda y un salario a su personal. No es una solución generalizada”, dijo.
Los sindicatos advierten que los salarios de los trabajadores hoteleros aumentaron un 3% el año pasado, mientras que los alquileres en España aumentaron en promedio un 11,5% en 2024, según Idealista, un sitio web de listados de propiedades. En puntos calientes como las Baleares, los residentes se han visto obligados a vivir en caravanas debido al aumento de los alquileres.
“Los salarios no están aumentando al mismo ritmo que los márgenes de los hoteles y la vivienda es un problema en las zonas turísticas”, dijo José María Martínez, líder sindical del sector hotelero en CCOO.
En las Islas Canarias, CCOO convocó una huelga de dos días en los hoteles durante la Semana Santa para exigir mejores salarios.
Las autoridades locales en los principales destinos turísticos han comenzado a restringir los permisos para alquileres turísticos, mientras que Barcelona y las Baleares han aumentado los impuestos turísticos en respuesta a las protestas de los residentes sobre el turismo de masas.
Escarrer dijo que prohibir a los turistas alojarse en casas de vacaciones en los centros de las ciudades también ayudaría a preservar la identidad cultural de España, señalando cómo el mercado de La Boquería en el centro de Barcelona se ha visto invadido por turistas.
“Hace quince años, La Boquería era ideal para interactuar con la gente de Barcelona y hoy en día el mercado recibe turistas que solo van allí para tomar fotos”, dijo.