Swiss singer Nemo emerged as the winner of this year’s Eurovision Song Contest in Sweden. However, Nemo expressed disappointment in the lack of support from the organizers amidst controversy over Israel’s participation in the show. Nemo, a 25-year-old non-binary artist, felt isolated and hopes for better support for future contestants. The European Broadcasting Union (EBU) acknowledged the need for changes to protect artists in future contests.
Leading up to the event, there were calls to ban Israel from the competition due to political tensions, leading to pressure on contestants like Nemo. Despite facing challenges, Nemo released a new single and secured a record deal after winning Eurovision. Reflecting on their experiences, Nemo described a tense atmosphere backstage and expressed disappointment in the EBU’s slow response to issues raised.
Looking ahead, Nemo emphasized the importance of ensuring the well-being of contestants in future contests, especially in light of ongoing global political tensions. The EBU stated that they are actively addressing individual incidents from this year’s contest and are committed to ensuring a positive and safe experience for all participants.
Nemo, along with other Eurovision contestants, rejected calls to boycott the competition over political issues, emphasizing the positive aspects of cultural exchange and connection that the contest fosters. Despite the challenges faced during this year’s Eurovision, Nemo remains optimistic about the contest’s potential to bring people together from diverse backgrounds. Getty Images
Israel, que ha participado en el concurso desde 1973, tuvo que cambiar la letra de su entrada después de que la versión original rompiera las reglas de neutralidad política porque se pensaba que hacía referencia a los ataques de Hamas del 7 de octubre de 2023.
En el evento, hubo tensiones entre la delegación israelí y algunos otros países, lo que Israel más tarde calificó como “una muestra sin precedentes de odio”.
Mientras tanto, durante las semifinales, el ex ganador sueco Eric Saade actuó en el intermedio con un pañuelo keffiyeh palestino envuelto alrededor de su muñeca.
Y en la antesala de la gran final, el concursante de Irlanda se retiró de un ensayo general después de quejarse de la cobertura de la televisión israelí de su actuación; y el cantante de Francia rompió con el protocolo en el ensayo general al interrumpir su canción para hacer un discurso apasionado sobre la paz.
Por separado, la entrada holandesa fue descalificada debido a un presunto enfrentamiento con una operadora de cámara mujer.
Aunque las disputas en parte opacaron su victoria, Nemo agregó que se mantuvieron enfocados en contar su historia, “porque era – y todavía estoy convencido de que lo es – una historia importante que contar”.
“Saber que tuvo un impacto, y que mucha gente encontró algo en eso, y mucha gente obtuvo algo de eso, especialmente jóvenes queer, eso me hace realmente feliz.”
EPA
Nemo se dio cuenta “de la magnitud” de lo que su victoria significaba para mucha gente
Nemo, que tenía 24 años en el momento del concurso, se convirtió en el primer artista no binario en ganar Eurovisión.
Adecuadamente, escribieron la canción ganadora, The Code, para explicar cómo llegaron a aceptar su identidad.
La victoria representó un gran momento para la comunidad LGBTQ que, durante mucho tiempo, ha tratado a Eurovisión como un refugio seguro.
“Fue solo después de Eurovisión que empecé a darme cuenta de la magnitud de lo que este momento significaba para mucha gente”, dijo Nemo.
Dijeron que su victoria desencadenó una discusión más amplia en su propio país, incluida la posibilidad de ofrecer una tercera opción de género en los pasaportes, algo que Suiza ha resistido hasta ahora.
Pero también sintieron que la victoria dio “esperanza a mucha gente queer y la sensación de ser finalmente comprendidos y vistos”.
“No crecí con una persona no binaria a la que admirar. Creo que recientemente han surgido estos modelos a seguir”, agregaron. “Estoy realmente agradecido incluso por ser parte de este momento en el tiempo.”
‘Locura post Eurovisión’
Nemo, que creció en Suiza, ha estado viviendo en Berlín durante los últimos años y recientemente se mudó a Londres.
Dijeron que la inspiración para su nuevo sencillo, Eurostar, llegó mientras viajaban en tren de París a la capital del Reino Unido en julio.
“En ese momento, estaba en la fase más loca de la locura post Eurovisión, eso era todos los días [sin] dormir, yendo a la siguiente parada, y sentí que el tren incorporaba todo eso.”
“Quiero bailar, quiero festejar, hacerlo como nunca antes,” canta Nemo en una canción que trata sobre vivir el momento y dejarse llevar por la música.
Dijeron que la canción también era una metáfora de su llegada a Londres, una ciudad que describieron como “inspiradora”.
Nemo describió la experiencia de Eurovisión como una de “locuras extremas”.
“Era un artista con base en Suiza que algunas personas de Suiza conocían y de repente tenías ojos a tu alrededor de todo el mundo”, dijeron.
Por ahora, se están enfocando en hacer música y disfrutar del momento. Pero ¿podrán convertir su victoria en fama duradera?
Algunos ganadores de Eurovisión claramente lo han logrado, como la banda de pop sueca Abba y la banda italiana Måneskin. Sin embargo, la mayoría no lo hace.
“No sé si mi objetivo es convertirme en Abba”, dijeron. “Creo que mi objetivo es encontrar mi propia voz.”
En cuanto a las esperanzas de Eurovisión del Reino Unido, después de que Alexander recibiera el temido ‘nul points’ del público este año, Nemo tiene el siguiente consejo.
“Diría a cualquier artista que esté pensando en ir a Eurovisión, simplemente hazlo, y creo que Olly realmente lo hizo”, dijeron.
“Hazlo si sientes que lo vas a disfrutar, y lo vas a disfrutar sin importar cuál sea el resultado.”