Un fugitivo italiano buscado por el horrendo asesinato de su tío ha sido capturado después de esconderse en Marbella.
El hombre de 39 años estaba hospedado en un hotel de lujo en la ciudad en julio cuando fue condenado y sentenciado a cadena perpetua por un tribunal en Italia.
Había huido justo antes de la sentencia y fue visto luciendo unos pantalones cortos rosados y una gorra blanca mientras disfrutaba de un hotel de €700 por noche con su hijo de 10 años y su esposa, completo con una piscina, gimnasio, restaurantes y bares de cócteles.
Pero el 1 de julio, los jueces en su país de origen lo encontraron culpable de matar a su tío y arrojar su cuerpo a un horno en la planta de fundición de la familia.
El asesinato había tenido lugar en octubre de 2015, pero debido a la falta de un cuerpo o pruebas de ADN, la policía tardó años en construir su caso y llevarlo a juicio.
Al enterarse de su condena, el italiano abandonó su Maserati en Marbella y condujo un coche de alquiler de vuelta a Italia.
La policía italiana revela el escondite del asesino fugitivo
El 12 de julio, finalmente lo localizaron en su casa en la localidad de Soiano del Lago, en la región norte de Brescia.
Según la agencia de noticias EFE, lo encontraron escondido debajo de su cama junto a €50,000 en efectivo.
Ha sido enviado a la cercana prisión de Cantu Mombello para cumplir el inicio de su condena de por vida.
Un tribunal italiano finalmente determinó que había matado a su tío dentro de la fábrica de fundición debido a un desacuerdo sobre la gestión del negocio.