Adrian Perkins se postulaba para la reelección como alcalde de Shreveport, Luisiana, cuando fue sorprendido por un duro golpe de campaña. Un anuncio televisivo satírico, pagado por un comité de acción política rival, utilizó inteligencia artificial para representar a Perkins como un estudiante de secundaria que había sido llamado a la oficina del director. En lugar de reprenderlo por hacer trampa en un examen o pelear, el director criticó a Perkins por no mantener seguras las comunidades y crear empleos.
El video superpuso el rostro de Perkins sobre el cuerpo de un actor que lo interpretaba. Aunque el anuncio fue etiquetado como creado con “tecnología informática de aprendizaje profundo”, Perkins dijo que fue poderoso y resonó con los votantes. No tenía suficiente dinero o personal de campaña para contrarrestarlo, y cree que fue una de las razones por las que perdió la carrera en 2022. Un representante del grupo detrás del anuncio no respondió a una solicitud de comentario.
“El anuncio deepfake afectó completamente nuestra campaña porque éramos un lugar con menos recursos en la boleta”, dijo Perkins, un demócrata. “Tenías que elegir dónde poner tus esfuerzos”.
Si bien tales ataques son comunes en el duro mundo de la campaña política, el anuncio dirigido a Perkins fue notable: se cree que es uno de los primeros ejemplos de un deepfake de IA utilizado en una carrera política en EE. UU. También anticipó un dilema que enfrentan los candidatos en cientos de carreras estatales y locales este año, ya que la IA generativa se ha vuelto más extendida y fácil de usar.
La tecnología, que puede hacer desde simplificar tareas mundanas de campaña hasta crear imágenes, videos o audio falsos, ya ha sido desplegada en algunas carreras nacionales en todo el país y se ha extendido mucho más en elecciones en todo el mundo. A pesar de su poder como herramienta para engañar, los esfuerzos para regularla han sido fragmentarios o retrasados, una brecha que podría tener el mayor impacto en las carreras menos destacadas en la boleta.
La inteligencia artificial es una espada de doble filo para los candidatos que dirigen tales campañas. Los modelos de IA económicos y fáciles de usar pueden ayudarles a ahorrar dinero y tiempo en algunas de sus tareas cotidianas. Pero a menudo no tienen el personal o la experiencia para combatir las falsedades generadas por IA, lo que se suma al temor de que un deepfake de última hora podría engañar a suficientes votantes para inclinar las carreras decididas por márgenes estrechos.
“Las amenazas habilitadas por la IA afectan a las carreras reñidas y a los concursos de bajo perfil donde los pequeños cambios importan y donde a menudo hay menos recursos para corregir historias engañosas”, dijo Josh Lawson, director de IA y democracia del Instituto Aspen.
Algunos candidatos locales ya han enfrentado críticas por utilizar la IA de manera engañosa, desde un candidato republicano al senado estatal de Tennessee que usó una foto AI para verse más delgado y joven hasta el sheriff demócrata de Filadelfia, cuya campaña de reelección promocionó noticias falsas generadas por ChatGPT.
Un desafío para separar hechos de ficción es la disminución de los medios de comunicación locales, lo que en muchos lugares ha significado una cobertura mucho menor de los candidatos que se postulan para cargos estatales y locales, especialmente informes que indagan en los antecedentes de los candidatos y cómo operan sus campañas. La falta de familiaridad con los candidatos podría hacer que los votantes estén más abiertos a creer información falsa, dijo el senador estadounidense Mark Warner de Virginia.
El demócrata, que ha trabajado extensamente en legislación relacionada con la IA como presidente del Comité de Inteligencia del Senado, dijo que la desinformación generada por la IA es más fácil de detectar y combatir en carreras de alto perfil porque están bajo mayor escrutinio. Cuando una llamada robocall generada por IA se hizo pasar por el presidente Joe Biden para desanimar a los votantes de ir a las urnas en las primarias de Nuevo Hampshire este año, fue rápidamente reportada en los medios y se investigó, lo que resultó en serias consecuencias para los responsables.
El régimen yihadista Boko Haram declaró la creación de un califato islámico en la ciudad de Gwoza, en el estado de Borno (noreste de Nigeria), afirmaron hoy los dirigentes de la secta en un video difundido por internet en el que se proclama el califato y se muestra la bandera del grupo con el lema “No hay más Dios que Ala”.
“La (ciudad de) Gwoza es la sede de nuestro califato islámico en Nigeria”, afirmó uno de los presuntos comandantes yihadistas en el video, difundido a través de foros islámicos de internet.
El pandillero mexicano Miguel Ángel Treviño Morales, alias el “Z-40”, uno de los narcotraficantes más sangrientos y poderosos de México, fue confirmado hoy por las autoridades de ese país como el detenido en una operación militar a las afueras de la ciudad de Nuevo Laredo, en el norte de la nación.
“El principal objetivo era la localización y recaptura del líder de los ‘Zetas’, Miguel Ángel Treviño Morales”, indicó Eduardo Sánchez, portavoz del Gobierno, quien especificó que fue el resultado de un trabajo de seis meses de la Secretaría de Marina Armada de México y que se efectuó sin un solo disparo.
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