Un hombre irlandés que estableció una nueva vida para sí mismo en la Costa Blanca, dice que ha sido excelente para su salud mental y que no se ve volviendo a casa pronto.
Scott McCormack, de 31 años, vive en Torrevieja y escribió una columna para The Irish Times sobre sus experiencias.
Él dice que, aunque los salarios son más bajos en comparación con Irlanda, el costo de vida es ‘mucho más barato’ y además el clima es mejor.
Scott, de County Kildare, dijo que nunca se imaginó dejando Irlanda hasta que sus padres se mudaron a España y luego se dio cuenta de que también podría encontrar algo mejor para sí mismo.
Largas jornadas de trabajo en casa, aunque en un trabajo bien remunerado, significaban que tenía poco tiempo para disfrutar los fines de semana, ya que siempre estaba tratando de ponerse al día.
Comenzó a visitar a sus padres y se enamoró de España y ‘se dio cuenta de que quería más de eso’.
Scott dio el salto y se mudó, antes de conseguir un trabajo para una empresa de atención médica con sede en la Costa Blanca.
Continúa: “Me di cuenta de que me encantaba el trabajo de cuidar a pacientes que habían viajado allí para operaciones desde Irlanda utilizando la Directiva Transfronteriza de la UE”.
“Por casualidad, un amigo mencionó que Surgery Now, una empresa irlandesa que también traía pacientes irlandeses a España para cirugías, estaba buscando un cuidador/conductor”.
“Envié mi currículum, hice la entrevista, y me ofrecieron el puesto y ahora recibo a los pacientes cuando aterrizan en el aeropuerto de Alicante-Elche”.
Scott le dijo a The Irish Times que estaba impresionado por los precios bajos del país.
“Aquí en España, encuentro el costo de vida mucho más barato que en casa. Cosas como el seguro de coche y los impuestos son mucho más baratos”.
“No hay demasiados problemas para encontrar un lugar para alquilar por una cuarta parte de lo que pagarías en casa”, agregó.
“No bebo muy a menudo, pero, cuando lo hago, todavía puedo conseguir una pinta aquí por 2€ y no necesito 100€ para una cena y una noche fuera”.
“Con los costos de vivienda y los problemas de costo de vida en Irlanda, simplemente no puedo verme regresando a casa en el corto plazo”.
Scott concluyó: “Cuando me levanto por la mañana aquí y siento el sol en mi cara, me siento vivo. Mi salud mental es mucho mejor aquí, haciendo mi trabajo con una gran satisfacción todos los días”.