GIBRALTAR ha invitado a España a llevar sus reclamaciones sobre las aguas territoriales del Peñón a ‘cualquier tribunal internacional’ y resolver el problema de siglos de una vez por todas.
Esto ocurre después de que el ministro de Asuntos Exteriores de España, Jose Manuel Albares, revelara en una carta vista por Olive Press que se presentó una protesta verbal ante la embajada británica por el polémico desarrollo de la marina de Eastside en agosto.
“Cualquier construcción o relleno [por parte de Gibraltar] en territorio no cedido en el Tratado de Utrecht constituye una violación de la soberanía e integridad territorial de España,” afirmó Albares en la última iteración de las reclamaciones de España sobre las aguas de Gibraltar.
El gobierno de Gibraltar le dijo a Olive Press en respuesta: “Cualquier tribunal internacional que considere estos asuntos de manera justa decidiría que las aguas son británicas, punto.”
Agregó que Madrid ‘entiende esto.’
“Incluso diplomáticos españoles retirados han confirmado que el Ministerio de Asuntos Exteriores español entiende privadamente que ese es el caso, a pesar de su posición pública sin sentido,” agregó.
El problema de las aguas territoriales ha sido motivo de controversia durante décadas.
Los barcos de la Armada española y de la Guardia Civil realizan frecuentes incursiones en aguas británicas en disputa para ‘afirmar su reclamación de soberanía’, mientras que el Reino Unido presenta quejas formales a Madrid en respuesta.
José Manuel Albares, ministro de Asuntos Exteriores de España, ha vuelto a abrir el tema de la propiedad de las aguas territoriales de Gibraltar
Los incidentes más recientes incluyeron el paso de un barco patrulla de la Armada española a menos de un kilómetro de la costa este de Gibraltar en agosto, mientras que solo dos semanas antes, una embarcación de la Guardia Civil navegaba de un lado a otro a solo unos cientos de metros de bañistas en Eastern Beach (Madrid sostiene que esos bañistas estaban nadando en aguas españolas.)
Mientras tanto, el problema de los barcos pesqueros españoles que pescan en lo que Gibraltar y el Reino Unido consideran como Aguas Territoriales Británicas de Gibraltar es una fuente perpetua de tensión.
Sin embargo, a pesar de la historia de constantes incursiones y acoso, España ha sido reacia a llevar el tema de la soberanía a un tribunal como la Corte Internacional de Justicia en La Haya.
El jefe de Gobierno Fabian Picardo ha sido un firme defensor de la soberanía de Gibraltar
La invitación más reciente para resolver el problema ‘de una vez por todas’ se realizó en 1966, cuando España rechazó una propuesta de Gran Bretaña de llevar el tema a la CIJ.
Desde entonces, el gobierno de Gibraltar ha afirmado que la invitación sigue abierta.
El ministro de Asuntos Exteriores de España en 2015, José Manuel García-Margallo, reconoció que la posición máxima de España de que poseía todas las aguas alrededor del Peñón sería difícil de defender en un tribunal.
En el centro de la disputa radica la ambigüedad en la redacción del Tratado de Utrecht de 1713, que cedió el control de Gibraltar al Reino Unido.
El gobierno español afirma que el tratado no cedió las aguas alrededor del Peñón, ya que no se mencionó en el texto.
Mientras que los expertos en derecho marítimo internacional señalan que no se hizo mención porque, hace más de 300 años, no existían conceptos de aguas territoriales delimitadas.
Mientras tanto, el gobierno de Gibraltar se refiere a la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (UNCLOS) que establece un mar territorial de tres millas generado por cada estado costero, ‘con la posibilidad de reclamar hasta doce millas donde la geografía lo permita.’
Espa…