Un informe del gobierno de EE. UU. que se espera que genere debate concluyó que el flúor en el agua potable a dos veces el límite recomendado está vinculado con un menor coeficiente intelectual en los niños.
El informe, basado en un análisis de investigaciones previamente publicadas, marca la primera vez que una agencia federal ha determinado, “con moderada confianza”, que existe una relación entre niveles más altos de exposición al flúor y un menor coeficiente intelectual en los niños. Aunque el informe no fue diseñado para evaluar los efectos en la salud del flúor en el agua potable por sí solo, es un reconocimiento sorprendente de un posible riesgo neurológico por niveles altos de flúor.
El flúor fortalece los dientes y reduce las caries al reemplazar minerales perdidos durante el desgaste normal, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. La adición de bajos niveles de flúor al agua potable ha sido considerada durante mucho tiempo uno de los mayores logros en salud pública del último siglo.
“Creo que este informe es crucial para nuestra comprensión de este riesgo”, dijo Ashley Malin, una investigadora de la Universidad de Florida que ha estudiado el efecto de niveles más altos de flúor en mujeres embarazadas en sus hijos. Lo calificó como el informe más rigurosamente conducido de su tipo.
El esperado informe, publicado el miércoles, proviene del Programa Nacional de Toxicología, parte del Departamento de Salud y Servicios Humanos. Resume una revisión de estudios realizados en Canadá, China, India, Irán, Pakistán y México, que concluye que el agua potable que contiene más de 1.5 miligramos de flúor por litro está consistentemente asociada con coeficientes intelectuales más bajos en los niños.
El informe no intentó cuantificar exactamente cuántos puntos de coeficiente intelectual podrían perderse en diferentes niveles de exposición al flúor. Pero algunos de los estudios revisados en el informe sugirieron que el CI era de dos a cinco puntos más bajo en niños que habían tenido exposiciones más altas.
Desde 2015, los funcionarios de salud federales han recomendado un nivel de fluoración de 0.7 miligramos por litro de agua, y durante cinco décadas antes, el rango superior recomendado era de 1.2. La Organización Mundial de la Salud ha establecido un límite seguro para el flúor en el agua potable de 1.5.
El informe dijo que aproximadamente el 0.6 por ciento de la población de EE. UU., alrededor de 1.9 millones de personas, está en sistemas de agua con niveles naturales de flúor de 1.5 miligramos o más.
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“Los hallazgos de este informe plantean preguntas sobre cómo se puede proteger a estas personas y qué tiene más sentido”, dijo Malin.
El informe de 324 páginas no llegó a una conclusión sobre los riesgos de niveles más bajos de flúor, diciendo que se necesita más estudio. Tampoco respondió qué podrían hacer los altos niveles de flúor en los adultos.
La Asociación Dental Americana, que defiende la fluoración del agua, había sido crítica con versiones anteriores del nuevo análisis y la investigación de Malin. Al solicitar comentarios, una portavoz envió un correo electrónico tarde el miércoles por la tarde diciendo que los expertos de la organización aún estaban revisando el informe.