Según un nuevo estudio, España está viendo un aumento en las personas que recurren a urgencias para acceder a tratamiento médico.
El Ministerio de Salud de España ha publicado un estudio que muestra cifras récord de pacientes en urgencias, con más de 31 millones en 2022 solamente.
Al mismo tiempo, se reveló que el número de pacientes ingresados en hospitales es del 9%, el más bajo en la última década.
Se cree que ambos fenómenos se deben a largas listas de espera y alta presión tanto en los sistemas de salud públicos como privados.
Según los expertos consultados por El País, la ‘deterioración’ de los sistemas de salud está detrás del alto número de ciudadanos que acuden a urgencias.
Medido por el número de pacientes por cada 1000 habitantes, la tasa de españoles que acuden a urgencias ha aumentado un 17% desde 2013.
Aunque la mayoría de los pacientes acuden a hospitales públicos (22.7 millones o 27%), el mayor aumento se ha visto en el sector privado, con un aumento del 45.6%.
La atención médica privada también ha experimentado un aumento en todos los servicios presenciales y listas de espera.
Según Sergio García Vicente, experto en urgencias y de la Asociación de Economistas de la Salud de España, el aumento se debe a que los pacientes ‘buscan atención urgente que no pueden obtener en otro lugar’.
“Tenemos que rechazar a muchas personas porque no tienen verdaderas emergencias”, dijo.
Durante el apogeo de la pandemia de Covid-19 en 2020, solo 17.1 millones de personas acudieron a urgencias, 5.5 millones menos que en 2022.
Un 11.5% fueron ingresados, la cifra más alta en la última década, lo que según los informes muestra un ‘uso más responsable de las urgencias’ y que ‘las personas saben lo que es una verdadera emergencia cuando es necesario’.
Según el pediatra Roi Piñeiro: “No podemos culpar a los pacientes, pero tal vez valdría la pena cobrarles a las personas si acuden a urgencias y realmente no es una emergencia, como hace el servicio de bomberos”.
Un estudio de El País ha mostrado anteriormente que la mitad de los centros de salud en España ofrecen citas en menos de 48 horas, pero esto varía mucho según la región y en algunos lugares puede llegar incluso hasta los 17 días.
En muchos de estos casos, los pacientes acaban yendo a urgencias, aunque los expertos advierten que la creciente presión en los servicios de salud de España también puede deberse al envejecimiento de la población.