LONDRES – Erik ten Hag dijo “No sé” cuando se le preguntó si tiene futuro en Manchester United después de su victoria en la final de la FA Cup contra Manchester City el sábado, pero su lenguaje corporal, mientras sostenía el trofeo frente a los seguidores del club, insinuaba lo que realmente sabía después de meses de especulación de que sería reemplazado como entrenador. Este debería haber sido su mejor momento desde su llegada del Ajax hace dos años, pero parece probable que también sea su último.
Ten Hag, de 54 años, acarició el escudo del United en su blazer como si estuviera tocando su corazón y luego saludó a los fanáticos en varias direcciones. Si no fue una despedida emocional, ciertamente fue una forma extraña de celebrar ganar un segundo trofeo en dos temporadas como entrenador.
Antes de eso, abrazó a sus jugadores individualmente al final del partido, pero no fueron abrazos de celebración, más bien expresiones de agradecimiento, palmaditas consoladoras en la espalda. Sus conversaciones con Harry Maguire y Luke Shaw, los dos defensores de Inglaterra que se perdieron la victoria 2-1 en Wembley contra City debido a lesiones, parecían como un padre diciéndole a un niño que todo estaría bien en el futuro.
Hubo menos calidez personal con Sir Jim Ratcliffe, propietario minoritario del United, cuando Ten Hag recogió la copa en el Palco Real. Un apretón de manos profesional es probablemente la mejor forma de describirlo.
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El telón de fondo de las escenas posteriores al partido fue proporcionado por la preparación previa al partido. Un informe del viernes indicaba que Ten Hag sería despedido por United independientemente del resultado de la final de la Copa.
Hace ocho años, Louis van Gaal sufrió el mismo destino, con el exentrenador del Ajax, Barcelona y Bayern Munich despedido dentro de las 48 horas de una victoria por 2-1 contra Crystal Palace y reemplazado por Jose Mourinho. Si lo mismo le sucede a Ten Hag, United no ha confirmado los informes de que será despedido, parecerá un final particularmente brutal para un reinado de dos años que prometía mucho inicialmente pero se desvaneció en su segunda temporada.
Sin embargo, los nuevos propietarios minoritarios del United, el grupo INEOS de Ratcliffe, han encargado una revisión detallada de todos los asuntos futbolísticos en Old Trafford y el veredicto se basará en lo que ha sucedido en las semanas y meses previos a la final de la Copa. Si Ten Hag pierde su trabajo, será porque un equipo muy costoso terminó octavo en la Premier League, quedó eliminado de la Champions League en la fase de grupos e irritó a los aficionados con una serie de actuaciones inexplicablemente malas.
Ganarle al City de Pep Guardiola, los cuatro veces campeones de la Premier League, es, con mucho, la mayor victoria de Ten Hag, pero la realidad es que lo dejó demasiado tarde, hasta el punto de que parece una anomalía, una que no es ni de lejos suficiente para revertir las pruebas acumuladas en su contra.
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Es una situación confusa.
United no ha negado que han evaluado entrenadores alternativos en los últimos meses, incluido el seleccionador de Inglaterra Gareth Southgate, Thomas Frank de Brentford y Kieran McKenna de Ipswich, sin embargo, también han dicho que INEOS está planeando la próxima temporada con Ten Hag en mente. Media hora después de decirle a la BBC en Wembley que no sabía si estaría en United la próxima temporada, dijo en su rueda de prensa que le han dicho que es parte de los planes.
“¿Cuántas veces tengo que decírtelo?”, preguntó Ten Hag a los miembros de los medios. “Cada vez es la misma pregunta, ¿tengo que repetirme 10, 15, 20 veces? No tienen que decírmelo cada semana si me lo dicen tan a menudo. Lo he escuchado muchas veces”.
El tiempo lo dirá, pero una declaración del club en un día tranquilo en las semanas venideras agradeciendo a Ten Hag por sus esfuerzos no sería una sorpresa. Así es como funciona el fútbol, y él lo sabe tan bien como cualquiera que haya ganado la vida con el juego.
Si este es su último golpe, sin embargo, qué forma de hacerlo. Una victoria en la FA Cup contra los rivales locales del United, entregada por goles de dos de sus estrellas adolescentes.
Erik ten Hag besa la FA Cup después de que su Manchester United venciera a los rivales Manchester City en la final el domingo en Wembley. Michael Regan – The FA/The FA via Getty Images
Ten Hag ha convertido a Alejandro Garnacho y Kobbie Mainoo – ambos de 19 años – en titulares habituales durante su tiempo al mando. Ellos son las luces brillantes del futuro del United.
Aunque aún no merecen comparaciones con Wayne Rooney y Cristiano Ronaldo cuando se convirtieron en estrellas del primer equipo en United hace 20 años, Ten Hag ciertamente merece crédito por poner su fe en ellos para rendir. Sin embargo, no ha podido obtener tales actuaciones de nivel superior esta temporada de sus jugadores establecidos, incluidos Marcus Rashford, Casemiro y Raphaël Varane.
Si Ten Hag es reemplazado, su sucesor tendrá dos joyas para pulir en Garnacho y Mainoo.
Garnacho puso adelante al United cuando aprovechó un error entre Josko Gvardiol del City y el portero Stefan Ortega a los 30 minutos. El extremo argentino luego ayudó a crear el segundo para Mainoo nueve minutos después con una carrera por la banda derecha seguida de un pase a Bruno Fernandes, quien brillantemente habilitó a Mainoo con un pase de primera.
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DOMINGO, 26 DE MAYO (todos los horarios son del este)
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LUNES, 27 DE MAYO (todos los horarios son del este)
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La experiencia de Sofyan Amrabat junto a Mainoo en el centro del campo fue clave, ayudando al United a mantenerse firme contra el poderoso centro del campo del City. Ten Hag merece un reconocimiento por seleccionar al internacional marroquí en este partido.
Aunque el gol de Jérémy Doku en el minuto 87, que venció al portero André Onana demasiado fácilmente en el primer palo, aseguró un final tenso para el United, los jugadores de Ten Hag se aferraron para ganar la Copa por primera vez en ocho años y hacer que sean dos trofeos en dos temporadas para el holandés.
“Cuando comencé aquí, dije que estoy aquí para ganar y también quiero construir un equipo y ambos lo estoy haciendo”, dijo Ten Hag. “Pero si ya no me quieren, iré a otro lugar y ganaré partidos y trofeos”.
Desafiante hasta el final, y Ten Hag ha ganado el derecho de serlo.
Aunque esto se sintió como el comienzo de algo, también se sintió como un llamado final. Varane se va como agente libre, Amrabat regresará a la Fiorentina al final de su cesión y hay dudas sobre los futuros de Rashford, Casemiro, Maguire, Victor Lindelöf, Aaron Wan-Bissaka y más.
La mayor partida casi segura será la de Ten Hag. En el fondo, él sabe cómo funciona, y ni siquiera una victoria en la FA Cup sobre Manchester City es probable que sea suficiente para salvarlo.