Un hombre de 84 años está siendo juzgado de nuevo por matar a un ladrón después de que su absolución original fuera anulada el año pasado.
Un tribunal de Palma escuchó esta semana cómo Pau Rigo disparó al ladrón Mauricio Escobar, de 25 años, en el estómago con una escopeta a quemarropa en febrero de 2018.
Mauricio y su hermano gemelo Freddy habían apuntado a la casa de Porreres del empresario jubilado sabiendo que guardaba grandes cantidades de dinero en la caja fuerte, y no era la primera vez que atacaban.
En octubre de 2017, Freddy y la llamada ‘Banda del Demonio’ habían atado a Rigo, lo obligaron a abrir su caja fuerte y se llevaron 30.000 euros.
Cuando regresaron cuatro meses después exigiendo 200.000 euros que creían que estaban escondidos en su casa por la venta de su negocio, Rigo, que tenía 78 años en ese momento, logró agarrar una escopeta cargada.
El abogado defensor de Mauricio ha afirmado que esta escopeta fue colocada en ‘preparación’ para matar a sus clientes en un acto ‘desproporcionado’.
El juicio original en 2023 encontró culpable a Rigo, quien afirma que actuó en defensa propia, de homicidio imprudente, pero el caso ha pasado por varios giros legales.
El tribunal provincial de Palma anuló el veredicto por motivos técnicos y luego decidió que no había ‘evidencia insuficiente’ de que Rigo tuviera ‘intención de causar la muerte de Mauricio’.
Entretanto, los fiscales apelaron y el Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares ordenó el actual nuevo juicio.
Un oficial de la Guardia Civil que respondió a la escena del crimen le dijo al tribunal que vio ‘Vi a un tipo tendido en el suelo y a dos personas mayores dentro de la casa, asustadas y cubiertas de sangre’.
Mientras tanto, un experto forense que testificó concluyó que Mauricio estaba lanzándose hacia Rigo cuando se disparó el disparo mortal.
La acusación solicita cuatro años de prisión para Rigo, quien se espera que conozca su destino la próxima semana.