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El Real Mallorca comenzó este partido contra el Athletic Club (Bilbao) lleno de confianza, habiendo alcanzado su mejor cantidad de puntos desde la temporada 2009/10 después de diez partidos de La Liga. Comenzaron como un equipo poseído y casi tomaron la delantera después de 90 segundos, cuando el esfuerzo de Muriqi fue salvado por Agirrezabala. Minutos después, Samu Costa recibió una tarjeta roja por una entrada imprudente sobre el ex jugador del Mallorca, Galarreta. Repeticiones del incidente mostraron que Costa de hecho había tocado el balón y después de la consulta con el VAR, la tarjeta roja se convirtió en amarilla. Sin embargo, poco después, Costa tuvo otra reacción impulsiva y después de un choque fuerte, recibió una segunda amarilla, ¡así que Costa fue expulsado para ser el primero en usar la esponja!
El árbitro Martinez Munuera luego mostró tres tarjetas amarillas más que vieron a Mojica, Muriqi y Larin entrar en el libro de las amonestaciones. Larin fue sustituido poco después y en un ataque de ira, pateó una botella de agua hacia la multitud. Habrá alguna repercusión por ese incidente tonto. Es seguro decir que el árbitro tuvo un mal partido y su excesivo uso de la tarjeta amarilla empañó los acontecimientos.
Para entonces, el entrenador del Mallorca, Jagoba Arrasate, tuvo que alterar su plan de juego ya que su equipo estaba bajo una fuerte presión. Lo que había comenzado como un gran juego de fútbol, especialmente por parte del Mallorca, se convirtió en un juego de ataque contra defensa.
De alguna manera, el Mallorca encontró más energía y con los 19,797 espectadores (una cifra enorme para un partido de lunes por la noche) animándolos, nuestra portería llevaba una vida encantada. Ataque tras ataque fue repelido por nuestra sólida defensa mientras los visitantes desperdiciaron muchas oportunidades de oro. El partido estaba llegando a su fin con el Mallorca aguantando con fuerza. El muy solicitado extremo del Bilbao, Nico Williams, hizo temblar el travesaño con un exquisito disparo en curva, luego Greif en la portería del Mallorca realizó una brillante parada.
El premio del Mallorca por su esfuerzo valiente fue, bajo las circunstancias, fantástico, y ve al equipo de Palma llegar a 18 puntos, los mismos que el Bilbao, Betis y Osasuna. Estamos en séptimo lugar conjunto. El sufrimiento fue máximo y el punto sabía a victoria. Observando desde las gradas estaban el nuevo seleccionador de Inglaterra, Thomas Tuchel, y el ex portero alemán Oliver Kahn.
El próximo partido es como visitantes contra el Alavés el viernes por la noche a las 21:00. ¡Visca Mallorca!
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