Los seguidores del partido del Congreso celebrando en la sede del partido durante el recuento de votos en Nueva Delhi el martes. Crédito… Atul Loke para The New York Times
En la última elección general de la India, en 2019, el partido del primer ministro Narendra Modi ganó 303 de los 543 escaños parlamentarios, casi seis veces más que el principal partido de la oposición, el Congreso Nacional Indio. Fue un golpe electoral contundente para el Congreso, un partido una vez dominante que ha parecido muy disminuido en los últimos años, y las encuestas de salida en las elecciones de este año no habían sugerido que le iría mucho mejor.
Pero los primeros resultados electorales del martes indicaron un resultado mucho más fuerte de lo esperado para el Congreso. El partido y sus aliados lideraban en casi 230 carreras, un giro drástico que provocó jubilo en la sede del Congreso en Nueva Delhi, donde los seguidores estallaron en aplausos cada vez que un canal de televisión anunciaba un nuevo liderazgo para uno de sus candidatos.
“Sea cual sea el resultado final, una cosa está clara: es una victoria moral para el Congreso y nuestro líder Rahul Gandhi, y una derrota para el B.J.P.,” dijo Robin Michael, un trabajador político, refiriéndose al Partido Bharatiya Janata de Modi.
Aunque no había indicación de que el Congreso y la coalición de oposición que lidera lograrían reunir una mayoría para derrocar a Modi, los trabajadores del partido dijeron que habían dañado la aura de invencibilidad de Modi. Elogiaron a Gandhi, la figura más prominente del partido del Congreso y bisnieto de Jawaharlal Nehru, el primer ministro de la India después de la independencia.
El año pasado, mientras Gandhi buscaba mejorar su posición liderando largas marchas por toda la India, el B.J.P. lo atrapó en un caso judicial que llevó a su expulsión del Parlamento. Más tarde fue devuelto a su escaño por el tribunal más alto de la India. El martes, Gandhi estaba en camino de ganar su escaño parlamentario en el estado sureño de Kerala.
El Congreso, posicionado durante mucho tiempo en el centro político de la India, ha luchado por encontrar una dirección y ofrecer una alternativa ideológica al B.J.P. nacionalista hindú. Ha enfrentado rebeliones, luchas internas y períodos de reflexión sobre si respaldar un nuevo rostro, solo para mantenerse con su liderazgo dinástico.
Este año, a pesar de las expectativas, Gandhi se fijó el objetivo de duplicar el total de 52 escaños del partido en 2019. A últimas horas de la tarde del martes, lideraba en casi 100 escaños.
“Detendremos a Modi de burlarse de este país y de enfrentar a la gente entre sí,” dijo Sandeep Mishra, un trabajador del Congreso en la sede del partido. Agregó: “Los indios están hartos de Modi.”