SALTA, Argentina – En un domingo brillante y soleado, 16 de junio, cuando el Elder D. Todd Christofferson dedicó el Templo de Salta Argentina como uno de los dos templos más nuevos de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, lo único más cálido en los terrenos del templo eran los sentimientos de amistad, compañerismo, reuniones y recuerdos.
Y todo fue magnificado por el Espíritu mientras los Santos de los Últimos Días daban la bienvenida alegre y llorosamente a una casa del Señor en la ciudad del norte de Argentina, Salta.
Las reuniones del domingo incluyeron no solo a Santos de los Últimos Días de Salta y la provincia del mismo nombre, sino también de provincias vecinas en un distrito del templo que se extiende hasta el sur de Bolivia. Las reuniones fueron entre miembros locales y antiguos misioneros de tiempo completo que habían servido en el norte de Argentina y que no se habían visto durante décadas.
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