CIUDAD DE PUERTO PRINCESA—Adonis Ramos Jr., de 16 años, se paró orgullosamente en lo más alto del podio de la competencia de levantamiento de pesas de 55 kilogramos en la categoría de chicos menores de 17 años en los Juegos Batang Pinoy 2024 de la Comisión de Deportes de Filipinas con una medalla de oro alrededor de su cuello.
En este mismo torneo el año pasado, el levantador de 16 años cargaba la decepción de un tercer lugar y una medalla de bronce.
Article continues after this advertisement
“No era tan fuerte el año pasado. Esta vez, mostré mi fuerza, que soy capaz de ganar oro. Me lo merezco a través del trabajo duro y la perseverancia”, dijo Ramos sobre su triunfo de redención.
Ganadores del podio
El pupilo de la campeona olímpica Hidilyn Diaz-Naranjo levantó 85 kg en el envión y 100 kg en el arranque, logrando un total de 185 kg. Su actuación llenó de orgullo al Equipo HD, el programa de base liderado por Diaz-Naranjo y su esposo, Julius, en Jala-Jala, Rizal.
El principal competidor de Ramos, Jeffre Julli de la Ciudad de Zamboanga, ganó la medalla de plata con un total de 161 kg, mientras que Knykolai Ortega aseguró el bronce con un levantamiento de 76 kg.
Article continues after this advertisement
Diaz-Naranjo, la primera medallista de oro olímpica de Filipinas en Tokio 2020, enfatizó el valor de las experiencias tempranas en competiciones como Batang Pinoy.
Article continues after this advertisement
“Es importante que los niños experimenten el fracaso a una edad temprana para ayudar a construir su capacidad de recuperación”, dijo.
Otros triunfos de HD
El éxito del Equipo HD se extendió más allá de la victoria de Ramos. Su victoria fue una de las cuatro medallas de oro ganadas por levantadores de la provincia de Rizal, incluyendo al sobrino de Diaz, Matthew Diaz (chicos de 43 kg menores de 13 años), Maybelle Briones (chicas de 35 kg menores de 13 años) y Reynadine Marie Jimenez (chicas de 40 kg menores de 13 años).
El equipo también aseguró seis medallas de plata y una de bronce. Diaz-Naranjo describió el viaje de los jóvenes levantadores como lleno de triunfos y desilusiones, experiencias vitales para su crecimiento como atletas.
Article continues after this advertisement
Para Ramos, el futuro brilla con luz propia. Equilibrando sus estudios como estudiante de 11º grado y un entrenamiento riguroso, sueña con emular el éxito internacional de su mentora.
“Todavía no tengo experiencia internacional. Pero sé que si entreno bajo su tutela (Hidilyn), puedo aprender mucho y mejorar mi levantamiento”, dijo.