El Papa Francisco permanecerá en un hospital de Roma después de ser ingresado a finales de la semana pasada tras una serie de pruebas que indicaron un “cuadro clínico complejo”, dijo el Vaticano el lunes, aumentando preocupaciones sobre la salud del pontífice de 88 años.
Las pruebas diagnósticas realizadas después de que Francisco fuera llevado al Policlinico A. Gemelli el viernes presentaron “una infección polimicrobiana del tracto respiratorio”, y sus médicos cambiaron el tratamiento en consecuencia, dijo el Vaticano en un comunicado.
El cuadro clínico complejo “requeriría una estancia médica apropiada”, dijo, sin dar más detalles.
Francisco fue hospitalizado en 2023 con una infección respiratoria, pero pudo salir del hospital después de tres días.
El Papa ha tenido una agenda ocupada desde la víspera de Año Nuevo, cuando presidió la apertura del Jubileo de 2025, que se celebra cada 25 años en la Iglesia Católica Romana.
El Vaticano anunció a principios de febrero que Francisco tenía bronquitis, pero continuó con sus actividades, celebrando audiencias más pequeñas en la Casa Santa Marta, la casa de huéspedes del Vaticano donde vive, pero presidiendo reuniones y misas más grandes con miles de peregrinos, incluida una misa al aire libre en la Plaza de San Pedro a principios de este mes.
El Vaticano dijo que se canceló una audiencia general el miércoles.
Después de ingresar al hospital, los médicos recetaron reposo completo. Actualizaciones médicas posteriores dijeron que estaba en condición “estable”.
El Papa, que tuvo parte de un pulmón extirpado cuando era joven, tiene antecedentes recientes de desafíos médicos. Tiene problemas de rodilla y ciática que le han causado una severa cojera y, en años recientes, a menudo ha necesitado usar silla de ruedas, andador o bastón.
En 2021, fue operado de colon. Después de su episodio de bronquitis en 2023, fue hospitalizado nuevamente unos meses después para someterse a una cirugía abdominal por una hernia. El año pasado, se sometió a pruebas diagnósticas en el hospital Gemelli después de un ligero resfriado.
El lunes por la mañana, Francisco desayunó y leyó algunos periódicos después de una noche de descanso, dijo Matteo Bruni, un portavoz del Vaticano, añadiendo que el pontífice estaba “de buen ánimo”. Bruni dijo que se emitiría una actualización médica más tarde el lunes.