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Es esa época del año en la que los escritores de viajes y las principales publicaciones enumeran sus destinos principales para la temporada de verano, y Mallorca recientemente ha sido galardonada con la playa más feliz, sin mencionar una gran cantidad de mejores playas y pueblos más bonitos, así que ¿por qué hay tanta indignación en Mallorca?
Sin duda, todos deberíamos estar felices, las últimas cifras de la industria global apuntan a 98 millones de visitantes a España este año – ¿Ahí está el problema? A pesar de todas las amenazas de más y mayores protestas contra el turismo masivo y la retórica poco convincente de las autoridades locales, se espera que este año lleguen más turistas a Mallorca y a las Baleares, con las aerolíneas aumentando el número de asientos – así que la demanda debe estar ahí.
El único grupo que se ha enfrentado al movimiento de “sobrepoblación” han sido los hoteleros, que han señalado que solo ocurre en ciertos momentos pico del año y en un puñado de lugares. El gobierno aún parece indeciso sobre cuál es su postura real. Pero más allá de los números, ¿qué pasa con los precios? Según el resultado de una encuesta del periódico esta semana, en el momento de ir a prensa, el 82% de los encuestados sostienen que Mallorca es demasiado cara. Mallorca necesita tomar el control de la situación con un mapa claro y rápido, no se puede permitir que siga siendo el Lejano Oeste.
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