El himno nacional de Israel fue fuertemente abucheado antes de que su equipo de fútbol iniciara su participación en los Juegos Olímpicos de París contra Mali el miércoles por la noche.
El juego comenzó con una gran presencia de seguridad fuera del estadio en medio de un clima internacional cada vez más tenso que pone los esfuerzos de seguridad de París en el centro de atención.
El equipo de Israel llegó bajo una fuerte escolta policial, con motoristas en la parte delantera y alrededor de una docena de furgonetas de policía antidisturbios siguiéndolos. Agentes de policía armados patrullaban el estadio Parc des Princes, uno de ellos con un rifle apoyado en el hombro. El ministro del Interior de Francia, Gérald Darmanin, y el jefe de policía de París, Laurent Nunez, llegaron al estadio alrededor de las 7:30 p.m.
“Le debemos esta seguridad al mundo entero”, dijo Darmanin. “Las amenazas a nuestro país son las amenazas que conciernen al mundo occidental.”
La atmósfera fuera del recinto era tranquila, sin embargo. Los seguidores de ambos países se mezclaban, levantando banderas y posando para fotos.
Los seguidores de Mali cantaron con orgullo cuando su himno fue el primero en sonar. Cuando llegó el turno del himno de Israel, inmediatamente se escucharon abucheos y silbidos. El sistema de altavoces del estadio aumentó notablemente el volumen de los himnos en lo que parecía ser un esfuerzo por ahogar los abucheos.
Una vez que comenzó el juego, los jugadores israelíes fueron abucheados cada vez que tocaban el balón. Los agentes de seguridad intervinieron en lo que parecía ser una acalorada discusión entre algunos seguidores. El alboroto ocurrió cerca de donde una mujer sostenía una bandera palestina. Dos personas más con banderas de Palestina se pararon junto a la mujer.
El juego terminó 1-1, con Israel tomando la delantera después de un gol en propia puerta del defensor Hamidou Diallo en el minuto 57. Mali igualó pocos minutos después con un potente cabezazo de Cheickna Doumbia, provocando celebraciones salvajes por parte de la gran cantidad de seguidores de Mali.
Francia está bajo presión para hacer seguros los Juegos de París del 26 de julio al 11 de agosto. La ciudad ha sufrido repetidamente ataques extremistas mortales y las tensiones están altas debido a las guerras en Ucrania y Gaza.
La seguridad se ha intensificado a niveles extremos para la ceremonia de apertura del viernes en el río Sena. Escuadrones de policía han estado patrullando las calles de París, los aviones de combate y los soldados están listos para actuar y se han erigido barreras de seguridad de metal a ambos lados del río.
Darmanin dijo anteriormente que los atletas israelíes serían protegidos las 24 horas del día por la unidad de élite de policía GIGN, que se encarga de la lucha contra el terrorismo y la protección de funcionarios gubernamentales, entre otras cosas.
“Las fuerzas de policía no tendrán vacaciones este verano para garantizar la seguridad de todos y en particular, de las delegaciones consideradas sensibles como la delegación israelí para la cual hemos reforzado la seguridad gracias a nuestras unidades de élite”, dijo la portavoz de la Policía Nacional, Sonia Fibleuil, el miércoles. “Todos los partidos considerados sensibles contarán con una seguridad reforzada con fuerzas especiales y unidades de élite, pero también con un aparato de seguridad más amplio con recursos especiales.”
París está desplegando 35,000 agentes de policía cada día para los Juegos Olímpicos, con un pico de 45,000 para la ceremonia de apertura. Además, 10,000 soldados están participando en operaciones de seguridad en la región de París. Francia también está recibiendo ayuda de más de 40 países que juntos han enviado al menos 1,900 refuerzos policiales.
Mali rompió relaciones diplomáticas con Israel y está en contra de la actual operación militar israelí en Gaza. En los últimos años, Israel ha renovado lazos diplomáticos con varios países musulmanes en África subsahariana, incluidos el vecino de Mali, Guinea, Chad y Sudán.
Otros partidos que involucran a Israel han tenido problemas de seguridad.
En mayo, el inicio de la fase de clasificación del Campeonato de Europa femenino entre Escocia e Israel en Glasgow se retrasó después de que un manifestante se encadenara a un poste. Se jugó sin espectadores después de que se tomara la decisión de reembolsar a los titulares de entradas tras recibir información sobre interrupciones planeadas en protesta por la ofensiva de Israel en Gaza.
El mes pasado, la ciudad de Bruselas dijo que no albergará un partido de la Liga de Naciones de la UEFA entre Bélgica e Israel en septiembre debido a la “dramática situación en Gaza” que crea un dolor de cabeza en materia de seguridad para los funcionarios de la ciudad.
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