Durante demasiado tiempo hemos estado ignorando la fuerza laboral de atención médica más grande de América. Estoy hablando de una estadística impactante que rara vez aparece en los titulares: los 53 millones de cuidadores familiares de América proporcionan un estimado de $600 mil millones de cuidado no remunerado anualmente. Es hora de hacer algo más para realmente apoyar a estos héroes ocultos.
Los cuidadores familiares son la columna vertebral del sistema de salud de América: las hijas que faltan al trabajo para cuidar a padres ancianos, los cónyuges que navegan por sistemas médicos complejos para parejas con demencia, y los padres que coordinan cuidados las 24 horas del día para niños con discapacidades. Sorprendentemente, el trabajo que realizan los cuidadores familiares, los $600 mil millones de cuidado no remunerado, es casi tres veces lo que Medicare gasta en servicios de atención a largo plazo.
Mientras muchos ven con escepticismo la nominación del Dr. Mehmet Oz para liderar los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid (CMS), hay un caso convincente de que su experiencia no convencional podría catalizar un apoyo muy necesario para los cuidadores familiares. Como alguien que trabaja diariamente con miles de familias que navegan por el cuidado de personas mayores, veo tres formas en las que el liderazgo del Dr. Oz podría transformar el apoyo a los cuidadores.
En primer lugar, la maestría del Dr. Oz en comunicación pública finalmente podría elevar el cuidado familiar de una lucha privada a una prioridad nacional. Durante demasiado tiempo, los cuidadores familiares han sufrido en silencio, con un 61% reportando un estrés emocional severo y un 45% experimentando dificultades financieras. La capacidad comprobada de Oz para traducir problemas de salud complejos en narrativas accesibles podría poner de relieve estos desafíos y construir voluntad política para soluciones. Así como su plataforma de televisión ayudó a millones a entender la salud del corazón, su nuevo papel podría convertir el cuidado familiar en una conversación cotidiana.
En segundo lugar, su compromiso de expandir los planes de Medicare Advantage abre posibilidades interesantes. Mientras que Medicare tradicional ofrece un apoyo mínimo a los cuidadores familiares, muchos planes de Medicare Advantage ya ofrecen beneficios innovadores como cuidado de relevo, programas diurnos para adultos y entrenamiento para cuidadores. La visión de Oz de expandir estos planes podría acelerar la adopción de beneficios amigables para los cuidadores. Imagina un sistema de Medicare donde los cuidadores familiares no solo reciban reconocimiento, sino recursos reales: programas de formación, cuidado de relevo y apoyo de coordinación.
En tercer lugar, la promesa de Oz de “eliminar el desperdicio y el fraude” dentro de CMS podría liberar recursos para lo que realmente importa. Actualmente, el gasto de Medicare en complejidad administrativa y procedimientos innecesarios supera con creces su inversión en apoyo a los cuidadores familiares. Al simplificar las operaciones y redirigir recursos, podríamos financiar programas que mejoren la atención y reduzcan los costos, como pagar a los cuidadores familiares por su trabajo esencial o proporcionar mejores opciones de atención en el hogar.
Los críticos señalarán las polémicas declaraciones pasadas del Dr. Oz sobre tratamientos no probados. Estas preocupaciones merecen atención. Pero no deberían opacar el potencial transformador de tener un líder de CMS que comprende tanto la medicina clínica como la participación pública. El desafío de apoyar a los cuidadores familiares requiere exactamente esta combinación: experiencia médica para entender las complejidades del cuidado, y habilidades de comunicación para construir apoyo para soluciones audaces.
Considera lo que está en juego. Para 2030, todos los Baby Boomers tendrán más de 65 años, creando demandas de cuidado sin precedentes. Nuestro sistema actual, que espera que las familias brinden cuidados médicos complejos con un apoyo mínimo, ya está cediendo. Necesitamos soluciones creativas que combinen la estabilidad del Medicare tradicional con enfoques innovadores para apoyar a las familias.
Tenemos la oportunidad de reimaginar cómo Medicare apoya a los millones de estadounidenses que brindan cuidados no remunerados. La nominación del Dr. Oz llega en un momento crucial en el que nuestra población envejecida y la crisis de cuidadores demandan un pensamiento fresco.
El camino a seguir es claro: expandir programas exitosos de apoyo a cuidadores en Medicare Advantage, reducir el desperdicio administrativo para financiar iniciativas de cuidado familiar y utilizar un liderazgo de alto perfil para generar impulso para la reforma. Con la supervisión adecuada y el compromiso con políticas basadas en evidencia, la experiencia única del Dr. Oz podría ayudar a lograr estos objetivos.
Los cuidadores familiares merecen un sistema de Medicare que reconozca su papel esencial y brinde un apoyo significativo. El liderazgo del Dr. Oz, a pesar de sus controversias, podría ser exactamente lo que necesitamos para finalmente dar a los cuidadores de América su merecido.