Las empresas chinas actualmente controlan el 75% de la capacidad de refinación de níquel de Indonesia, lo que plantea preocupaciones sobre la resistencia de la cadena de suministro, según un informe del Centro de Estudios Avanzados de Defensa (C4ADS), una organización sin ánimo de lucro con sede en Estados Unidos.
La propiedad de las empresas chinas puede impactar potencialmente las cadenas de suministro globales para el componente crítico utilizado en las baterías de vehículos eléctricos (VE), según el informe.
Se espera que la demanda mundial de níquel aumente de alrededor de tres millones de toneladas en 2023 a entre 5 y 6 millones de toneladas para 2040, principalmente debido a la expansión de las tecnologías de energía limpia.
En 2023, Indonesia y China juntas produjeron el 65% del níquel refinado en el mundo.
De 2020 a 2023, la participación de Indonesia en el mercado mundial de níquel refinado aumentó del 23% al 27%, principalmente como resultado de las prohibiciones de exportación de níquel en bruto implementadas en 2014 y 2020.
Sin embargo, gran parte de esta capacidad está en manos extranjeras, con 33 empresas controlando la capacidad de refinación de 8 millones de toneladas de Indonesia.
La superposición de accionistas reveló que las empresas chinas controlan alrededor de tres cuartas partes de esta capacidad de fundición a partir de 2023.
El informe encontró que Tsingshan Holding Group y Jiangsu Delong Nickel Industry, dos empresas chinas, representan más del 70% de la capacidad de refinación de Indonesia a partir de 2023. Esta concentración de propiedad plantea preocupaciones sobre el dominio de la industria.
Además, para 2030, se proyecta que Indonesia represente el 44% de la producción mundial de níquel refinado.
“Como Indonesia tiene como objetivo utilizar la industria del níquel para el crecimiento económico, esta influencia extranjera sustancial podría limitar su capacidad para controlar y dar forma a la industria en su beneficio”, agregó el informe.
La dominancia de las empresas chinas en este sector coloca a los fabricantes de automóviles estadounidenses y europeos en desventaja competitiva en el mercado global de VE, especialmente en medio de políticas comerciales cada vez más restrictivas con China, según el informe.
En un esfuerzo por hacer que el níquel indonesio sea más accesible al mercado estadounidense, las empresas chinas se han acercado a empresas indonesias y surcoreanas para posibles asociaciones con el fin de reducir sus participaciones en las fundiciones, informó Reuters.
Tsingshan ha comenzado a vender participaciones en algunas de sus fundiciones, incluido un 30% de participación en PT Jiu Long Metal Industry a la empresa minera estatal indonesia Aneka Tambang en octubre.
El Ministro de Minería de Indonesia, Bahlil Lahadalia, declaró el mes pasado que el Presidente Prabowo Subianto ha formado un grupo de trabajo para desarrollar la industria mineral de aguas abajo a través de financiamiento nacional, con el objetivo de “reducir gradualmente la percepción de que los extranjeros obtienen la mayoría de los beneficios”, según Reuters.
“El control de China sobre el 75% de la capacidad de níquel de Indonesia plantea preocupaciones” fue originalmente creado y publicado por Mining Technology, una marca propiedad de GlobalData.