El Congreso de Argentina el miércoles respaldó el veto del presidente Javier Milei a un proyecto de ley para aumentar las pensiones, mientras los manifestantes chocaban con la policía afuera del edificio.
Miles de personas se reunieron para protestar contra el veto de Milei, con la policía disparando gas pimienta y balas de goma a un grupo, incluidos pensionistas, que rompieron enojados una barrera después de la votación.
Milei, un libertario que recorta presupuestos, bloqueó la semana pasada un aumento del 8,1 por ciento en las pensiones aprobado inicialmente por ambas cámaras del Congreso, que tenía como objetivo ayudar a los jubilados en el país sudamericano golpeado por una inflación anual de casi el 240 por ciento.
El presidente afirmó que la medida “es manifiestamente contraria al marco legal actual al no considerar el impacto fiscal de la medida ni determinar la fuente de su financiamiento”.
Tras un duro debate que duró más de cuatro horas, el veto presidencial fue respaldado con 153 votos a favor, 87 en contra y ocho abstenciones.
“No podemos gastar lo que no tenemos, no hay dinero”, dijo la diputada Juliana Santillan del partido Libertad Avanza de Milei.
La pensión mínima equivale a $230 por mes.
Varios pensionistas estuvieron entre los que chocaron con la policía o fueron detenidos.
– ‘Traicionados’ –
Patricia de Luca, una psicóloga que acaba de jubilarse, dijo que se sentía “traicionada y desesperada” después de que los legisladores respaldaran el veto.
“Es una operación de seguridad excesiva, parece que estamos yendo a una guerra, no a una sesión parlamentaria”, dijo la legisladora de izquierda Cecilia Moreau al entrar al Congreso antes del debate.
Desde que asumió en diciembre, Milei ha aplicado un drástico programa de austeridad para frenar la inflación crónica y décadas de gasto excesivo del gobierno.
La inflación de agosto se situó en el 4,2 por ciento, el cuarto mes consecutivo por debajo del cinco por ciento y una caída masiva desde el 25,5 por ciento registrado en diciembre.
Sin embargo, la inflación interanual seguía siendo muy alta, del 236,7 por ciento.
Los críticos dicen que la pronunciada caída de la inflación y otras aparentes victorias económicas han tenido un costo para los pobres y las clases trabajadoras, y debido a un estrangulamiento de la economía.
El Congreso tenía el poder de anular el veto de Milei con un voto de mayoría de dos tercios en ambas cámaras, donde el partido gobernante es minoritario y dividido.
Sin embargo, varios legisladores de la centrista Unión Cívica Radical (UCR), fuerza impulsora de la ley para aumentar las pensiones, anunciaron el martes que habían cambiado su posición y ahora estaban a favor del veto.
El veto de Milei provocó especialmente enojo porque llegó después de que decretara un aumento de $102 millones en el presupuesto de la agencia de inteligencia estatal, lo que equivale a un aumento del 700 por ciento, sin exigir justificación de gastos.
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