En un aburrido partido de fútbol, el equipo italiano de la Liga de Campeones, Bologna (que terminó quinto en la Serie A la temporada pasada), venció a Real Mallorca en los penaltis frente a 9,963 aficionados adormecidos en un caluroso Son Moix el sábado por la noche.
Después de 90 minutos de poco que destacar, el partido terminó 1-1 al final del tiempo reglamentario. Afortunadamente nos ahorraron la prórroga y en la tanda de penaltis, el débil disparo de Verdat Muriqi se fue por el poste y Toni Lato envió el suyo por encima del travesaño hacia la fila Z de la zona de los Ultras. Bologna solo falló uno.
Los tres momentos destacados de esta aburrida fiesta fueron un gran gol de apertura después de ocho minutos del veloz japonés Takuma Asano, una gran actuación del nuevo lateral izquierdo colombiano, Johan Mojica, y otra muestra de integridad del joven delantero Marc Domenech. El joven, que ha marcado tres goles en la pretemporada, parece ser una gran promesa y un buen esfuerzo cerca del final se fue por el poste derecho.
En el descanso, el nuevo entrenador Arrasate cambió todo el equipo, pero nuestra actuación no mostró al entrenador vasco mucho que él ya no supiera, dejándolo con pocas ideas sobre nuestro mejor once mientras esperamos al Real Madrid el próximo domingo a las 9.30. Es un partido de alto voltaje, pero una tarea muy difícil como nuestro primer partido de la temporada contra posiblemente el mejor equipo del mundo.