La Red Europea de Lucha contra la Pobreza en las Islas Baleares estima que alrededor del 20% de la población de las islas está en riesgo de pobreza o exclusión social. Según el indicador de tasa de riesgo de pobreza o exclusión social (AROPE), el número de personas se sitúa en unas 250.000; la población, a partir del 1 de abril de este año, era de 1.238.812.
La cifra porcentual, que corresponde a 2023, es menor que en 2022 cuando era del 21,5%, y también es inferior al promedio nacional de 26,5% en 2023. El indicador AROPE no solo mide los recursos financieros. Por ejemplo, tiene en cuenta la débil inserción en el mercado laboral, lo que significa personas que viven en hogares sin empleo. Cuando se consideran únicamente los datos financieros, la tasa de pobreza era del 15,3%, una mejora respecto al 16,9% en 2022 y por debajo de un porcentaje nacional del 20,2%.
En total, había 185.000 personas en las Islas Baleares que estaban por debajo del umbral de pobreza, viviendo en hogares con ingresos inferiores al 60% del ingreso promedio.
La tasa de pobreza severa se refiere a hogares con ingresos por debajo del 40% del ingreso promedio nacional. Siete por ciento de la población balear se encontraba en esta situación, alrededor de 85.000 individuos.
En cuanto al perfil de las personas en riesgo de pobreza, el director de la EAPN en las Baleares, Andreu Grimalt, explicó el viernes que es muy difícil desglosarlo por género, edad e isla. “Aunque hemos visto un aumento en la pobreza infantil, no hay un solo perfil. Debemos evitar el estereotipo de que solo son inmigrantes irregulares. Obviamente tienen más probabilidades de terminar en situación de pobreza, pero nadie está vacunado contra la pobreza”.
En cuanto a la pobreza infantil, las cifras son más preocupantes: uno de cada tres menores estaba en riesgo de pobreza en 2023. Este porcentaje ha aumentado en los últimos años. En 2022, fue del 27%; en 2021, del 22,3%. En 2020, el año de la pandemia global, la tasa fue del 31,2%.