“Editarlo fue como terapia de exposición”: Shiori Ito, el rostro reacio del movimiento #MeToo en Japón | Películas documentales

She has also become a leading advocate for survivors of sexual assault in Japan, pushing for legal changes to better protect victims and hold perpetrators accountable. Despite the challenges she has faced, Shiori Ito remains determined to speak out and seek justice, using her documentary as a powerful tool for raising awareness and sparking change. Her courage and resilience serve as an inspiration to many, and her story continues to make a lasting impact on the fight against sexual violence in Japan. En 2022, se ordenó a Mio Sugita, miembro conservadora de la Cámara Baja del partido gobernante Liberal Democrático, que pagara a Ito ¥550,000 por “gustar” 25 tuits que difamaban a Ito, incluido uno que la acusaba de intentar conseguir un trabajo a través de favores sexuales.

Su caso también ha resultado en cambios legales en Japón, especialmente en la revisión del año pasado de una ley de violación que se remonta a más de un siglo y que obligaba a las víctimas a demostrar que habían sido incapacitadas por la violencia en el momento del asalto. La definición de violación se amplió de “relaciones sexuales forzadas” a “relaciones sexuales no consentidas”.

Ito ha comenzado a desmantelar el tabú en torno a la violencia sexual, pero casi una década después dice que Japón, donde, según una encuesta de 2017, solo el 4% de las mujeres denuncian agresiones sexuales, aún tiene un largo camino por recorrer. “Hay un movimiento #YoTambién en Japón, aunque no parece tan fuerte como en Corea del Sur y tal vez China. Hay mucho más que Japón tiene que hacer … solo mira todo el asunto de Sugita … esta era una mujer en una posición de poder político que básicamente me llamaba mentirosa”.

LEAR  El Abierto: Justin Rose toma aspectos positivos del segundo lugar frente a Xander Schauffele en Royal Troon | Noticias de Golf

Ito, quien ha pasado largos períodos en el Reino Unido desde que hizo pública su historia, en parte para frenar la avalancha de odio que siguió, espera que Black Box Diaries marque el final de su historia y el comienzo de una discusión más honesta sobre la violencia sexual. “Todavía tengo altibajos, pero son cada vez menos profundos”, dice. “Tengo 35 años y he pasado la mayor parte de mi juventud lidiando con esto. Aunque no sé cómo hubiera sido tener una vida ‘normal’ en mis últimos 20 años.

“Me gustaría que las personas que vean el documental sientan que todos tenemos el poder de contar una historia. Y espero que los empodere para creer en sí mismos y buscar ayuda”.

Black Box Diaries se estrena el 25 de octubre.