La Guardia Civil está investigando a dos conductores, de 35 y 51 años respectivamente, uno en moto y el otro en coche, por circular, en diferentes días, por las carreteras de la Serra de Tramuntana a 157 y 163 km/h, respectivamente. Ambos han sido acusados como presuntos autores de delitos contra la seguridad vial.
Según la Guardia Civil, el primer incidente se remonta al 1 de septiembre. Una moto fue captada por un radar móvil a 157 km/h en la carretera Ma-10, que conecta Pollensa con Andratx. El motociclista superó el límite de velocidad máximo de 60 kilómetros por hora en más de 80 kilómetros. Los agentes de tráfico lo localizaron unos días después y quedó bajo investigación.
Pocos días después, el sábado 7, el radar volvió a ‘atrapar’ a un conductor que circulaba a toda velocidad por la misma carretera.
En este caso, el sospechoso conducía un vehículo a 163 kilómetros por hora. El imprudente conductor sufrió la misma suerte que el motorista y fue acusado por la Guardia Civil tras ser localizado.
La plataforma “Indignats Ma-10” ha estado quejándose de que la situación con las carreras ilegales en las carreteras de la Serra de Tramuntana “sigue siendo la misma de siempre o peor”. La plataforma advierte de “accidentes de motocicletas contra autobuses, coches, otras motocicletas, jóvenes muertos o gravemente heridos, conductores, visitantes y excursionistas con miedo,…”.
También lamentan que “las cámaras que la Guardia Civil, en acuerdo con el Consell de Mallorca, tenía que instalar en la zona del Mirador de ses Barques, uno de los puntos más conflictivos de la Ma-10, están esperando a que alguien instale los soportes metálicos que llevan más de tres meses apilados en un lado de la carretera”.
Mientras tanto, “los criminales, convencidos de su impunidad, continúan cometiendo delitos y convierten el corazón de la Serra de Tramuntana en uno de los peores infiernos imaginables, tanto de día como de noche, poniendo en peligro la vida de la población en general que transita por ella y atacando ilegalmente una de las áreas ambientales supuestamente más protegidas de Mallorca”.