Converge se puso en marcha en el segundo período y jugó a toda velocidad el resto del camino el martes por la noche para sofocar a NLEX, 102-91, en una victoria que debería resultar crucial en más de un sentido para los FiberXers en la Copa del Comisionado de la PBA.
“Esto es un testimonio de cómo queremos que se hagan las cosas como equipo”, dijo el entrenador interino Franco Atienza poco después del triunfo en el Estadio Ninoy Aquino que tuvo al club de telecomunicaciones elevándose por encima del .500 con tres victorias y dos derrotas.
“Cuando vienes de una derrota, deja un sabor amargo en la boca. Así que solo queríamos volver a hacer lo que estábamos haciendo bien y revisar en qué podíamos mejorar”, agregó.
Además de poder recuperarse de una dolorosa derrota hace cinco noches, los FiberXers lograron realizar una actuación eficiente, contabilizando 28 asistencias con solo 11 errores, una proporción que tuvo a su entrenador emocionado en la charla posterior al juego.
Enorme recuperación
En la vanguardia de ese esfuerzo digno de elogio estuvo el importado Cheick Diallo, quien en realidad había tenido dificultades en sus dos últimos partidos. El gran hombre maliense entregó 37 puntos y 18 rebotes, además de jugar espléndidamente en defensa con dos robos y un par de tapones.
Alec Stockton también fue clave, aportando 16 puntos, cinco rebotes y cuatro asistencias, mientras que Jordan Heading y King Caralipio sumaron al menos 10 puntos cada uno en la victoria que también le dio al rival su segunda derrota consecutiva en una tarjeta de 3-3.
NLEX recibió una buena actuación del importado Mike Watkins, quien anotó 36 puntos y capturó 23 rebotes. Robert Bolick Jr. también tuvo una gran actuación con 26 puntos para liderar a los locales. Pero contra un equipo de Converge que estaba encestando tiros desde adentro y afuera y compartiendo bien el balón, los Road Warriors, uno de los primeros líderes del espectáculo de mitad de temporada, se quedaron sin gasolina.
Converge tendrá la oportunidad de ampliar su racha ganadora contra un Phoenix sin rumbo, pero será a expensas del descanso ya que los dos equipos se enfrentarán este jueves.
Los FiberXers jugarán nuevamente el sábado y una última vez este año en el Día de Navidad. Eso significa que Atienza y su equipo de jóvenes, que sorprendieron a la liga con su profunda carrera la temporada pasada, tendrán que disputar tres partidos en un lapso de siete días.
Pero parecen estar ansiosos por el desafío. “Cada equipo pasa por esto”, dijo Atienza sobre el calendario tan apretado. “Disfrutaremos de la competencia”. INQ