David Cronenberg ha sugerido que la controversia de inteligencia artificial sobre el acento húngaro de Adrien Brody en The Brutalist fue un problema fabricado por la campaña de una película rival de los Oscar.
Cronenberg habló en el festival London Soundtrack junto al compositor Howard Shore, y en declaraciones informadas por el Hollywood Reporter, dijo que los cineastas “juegan con las voces de los actores todo el tiempo”. Cronenberg dijo: “Hubo una discusión sobre Adrien Brody … [y] aparentemente usaron inteligencia artificial para mejorar su acento. Creo que fue una campaña en contra de The Brutalist por parte de otros nominados a los Oscar. Es muy parecido a algo de Harvey Weinstein, aunque él no estaba presente”.
Cronenberg se refirió a su película de 1993 M Butterfly, en la que John Lone interpreta al cantante de ópera de Beijing Song Liling. “Jugamos con las voces de los actores todo el tiempo. En el caso de John [Lone], cuando estaba interpretando a este personaje, este cantante, aumenté el tono de su voz [para que sonara más femenina] y cuando se revela como hombre, la bajé a su voz natural. Esto es simplemente parte de hacer películas”.
La polémica estalló originalmente en enero cuando el editor de The Brutalist, Dávid Jancsó, dijo en una entrevista con Red Shark que su voz se combinó con la de los actores principales de la película Brody y Felicity Jones, utilizando una herramienta de inteligencia artificial para crear un acento húngaro más convincente. El director de la película, Brady Corbet, defendió la práctica en un comunicado, diciendo: “Las actuaciones de Adrien y Felicity son completamente suyas … El objetivo era preservar la autenticidad de las actuaciones de Adrien y Felicity en otro idioma, no reemplazarlas ni alterarlas”.
Se descubrió alrededor del mismo tiempo que se utilizó un híbrido similar creado por inteligencia artificial para mejorar la voz de canto de Emilia Pérez, Karla Sofía Gascón; se mezcló con voces de Camille, la estrella pop francesa que coescribió la banda sonora de la película.
El problema no pareció perjudicar a Brody, quien ganó el Oscar al mejor actor por The Brutalist; sin embargo, Jones, Gascón y Corbet no ganaron.