“
Nuevas inspecciones de vehículos en carretera buscan atrapar a conductores con coches en mal estado.
Unidades móviles operadas por la DGT (Dirección General de Tráfico), el organismo gubernamental encargado legalmente de supervisar los vehículos de motor, han estado deteniendo vehículos al azar para llevar a cabo evaluaciones de su estado en carretera.
Perfectamente dentro de su derecho legal, ya han detenido más de 6,000 vehículos para una revisión en el acto. Las paradas no se anuncian ni se avisan previamente y pueden sorprender a muchos conductores.
Cualquier vehículo que circule por las carreteras puede estar sujeto a una inspección técnica de la ITV, independientemente de cuánto tiempo haya pasado desde la última vez que el conductor llevó su coche para una revisión oficial.
Los agentes de la ITV han estado realizando pruebas, a veces solo visualmente, a veces con todos los instrumentos técnicos que normalmente usarían en un centro de ITV.
Estas inspecciones aleatorias en las carreteras públicas pueden verificar desde la identificación de vehículos hasta el equipo de frenos, dirección, visibilidad, equipo de iluminación, componentes del sistema eléctrico, ejes, ruedas, neumáticos, suspensión, chasis y emisiones contaminantes. Es decir, prácticamente lo mismo que en cualquier cita obligatoria de la ITV.
Además, durante estas inspecciones sorpresa, los agentes suelen verificar también los compartimentos de carga y las verificaciones de certificados. En caso de que haya dudas en estas inspecciones y el personal técnico decida que debe ser más preciso, cualquier vehículo puede ser posteriormente dirigido por la Guardia Civil a una estación fija de ITV para una verificación completa. Fallos graves en los vehículos o en la documentación pueden conllevar multas graves o incluso la suspensión de la licencia.
“