El grupo rebelde Houthi respaldado por Irán se atribuyó la responsabilidad de un raro ataque con drones en el centro de Tel Aviv que se estrelló contra un edificio cerca del consulado de Estados Unidos temprano el viernes, matando al menos a una persona y dejando heridas a otras ocho.
El ejército israelí dijo que el dron probablemente había volado desde Yemen, donde se encuentran los houthis, antes de aproximarse a Tel Aviv desde la costa. El contraalmirante Daniel Hagari, portavoz militar israelí, dijo a los reporteros que el dron era un Samad-3, un modelo iraní, que había sido adaptado para vuelos de larga distancia.
Los sistemas de defensa de Israel aparentemente detectaron el dron pero no lo registraron como una amenaza, dijo el contraalmirante Hagari. “Estamos investigando por qué no lo identificamos, no lo atacamos ni lo interceptamos”, dijo.
No se activaron sirenas de alerta de ataques aéreos para advertir a los civiles del ataque, a pesar del extenso sistema de defensa aérea de Israel.
Un portavoz de la milicia Houthi, Yahya Sarea, dijo en una declaración televisada que el grupo había apuntado a Tel Aviv y que continuaría atacando la ciudad. Dijo que la milicia había utilizado un nuevo dron que puede evadir los sistemas de defensa de Israel y no es detectado por radares, pero el contraalmirante Hagari negó que el dron tuviera capacidades de sigilo que le permitieran evadir la vigilancia israelí.
Preguntado si Israel respondería al ataque, el contraalmirante Hagari dijo que primero trabajarían para evaluar completamente la situación.
Militantes respaldados por Irán en todo el Medio Oriente han disparado masas de cohetes y drones a Israel desde el ataque de Hamas el 7 de octubre que desencadenó la devastadora campaña de Israel en Gaza. Israel ha interceptado la mayoría de ellos, dejando a Israel central en gran medida indemne en los últimos meses, hasta el viernes, cuando el dron cargado de explosivos golpeó el edificio justo después de las 3 a.m.
Desde noviembre, los houthis también han estado atacando barcos a lo largo de una ruta vital en el Mar Rojo en lo que han descrito como una campaña en solidaridad con los palestinos en Gaza. El contraalmirante Hagari dijo que decenas de drones habían sido lanzados a Israel desde Yemen desde que comenzó la guerra con Hamas en octubre, la mayoría de los cuales fueron interceptados por fuerzas estadounidenses o israelíes.
Hezbollah, con sede en Líbano, ha lanzado miles de ataques contra el norte de Israel desde el inicio de la guerra, muchos de los cuales las defensas antimisiles de Israel han frustrado. Israel también ha lanzado miles de ataques contra Líbano en ese período. Más de 150,000 personas han huido de pueblos fronterizos en ambos países, con pocas perspectivas de regresar a casa.
Ron Huldai, el alcalde de Tel Aviv, dijo que la ciudad estaba en alerta máxima.
“La guerra todavía está aquí y es dura y dolorosa”, dijo en redes sociales, refiriéndose a la guerra de Israel con Hamas en la Franja de Gaza.
El cuerpo de un hombre de 50 años fue encontrado en un edificio de apartamentos cercano mientras los trabajadores de emergencia estaban peinando el área alrededor de la explosión, según un comunicado de Zaki Heller, portavoz del servicio de emergencias nacional de Israel. El hombre fue encontrado en su apartamento y tenía heridas de metralla, dijo la policía de Tel Aviv en un comunicado.
La policía describió a los heridos como “levemente heridos”. Cuatro de ellos sufrieron traumas penetrantes y contusos, dijo Roee Klein, un paramédico del servicio de emergencias nacional, en un video.
Testigos describieron una “explosión muy fuerte” audible a kilómetros de distancia. Un video de vigilancia ampliamente difundido en redes sociales y verificado por Storyful muestra un destello brillante, seguido de un estruendo y el sonido de una alarma.
La policía dijo que un gran número de fuerzas estaban respondiendo a la explosión. El ejército israelí dijo que las fuerzas de seguridad estaban en el lugar y que la fuerza aérea había aumentado las patrullas del espacio aéreo israelí.
Matthew Mpoke Bigg y Ronen Bergman contribuyeron con el reportaje.