Un oficial de la Guardia Civil con sede en el sur de España suministró a su hermano información vital que le ayudó a dirigir una gran red de tráfico de drogas.
El oficial estaba destinado en Pueblo Nuevo de Guadiaro en San Roque.
Se dijo que era una figura importante en la banda de hachís con base en la Costa del Sol y en la ciudad autónoma de Ceuta.
La operación de la Policía Nacional incluyó 20 registros domiciliarios en Marbella, Fuengirola, Estepona, Algeciras y Ceuta.
Se incautaron más de una tonelada de hachís, 500.000 euros en efectivo y bienes valorados en más de 2 millones de euros.
La policía dijo que uno de los líderes de la banda, es decir, el hermano del oficial detenido, aprovechó su relación para obtener información que facilitara el transporte de drogas.
El apoyo fue decisivo para mantener la operación de una red que también blanqueaba grandes cantidades de dinero a través de familiares implicados.
La operación policial, que comenzó en agosto de 2023, ha permitido desmantelar tres organizaciones criminales interconectadas.
La capacidad operativa de la banda era tal que, durante períodos de inactividad, alquilaban sus recursos como barcos a grupos más pequeños.
Esta forma de colaboración reforzaba su posición como una de las principales redes de tráfico de drogas en el Estrecho de Gibraltar.