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La contaminación del aire puede contribuir directamente al riesgo de demencia, según un estudio. Crédito: @htartha76128693, Twitter.
Científicos con sede en Estocolmo, Suecia, han descubierto que la exposición a una sustancia específica presente en los humos contaminantes del aire puede aumentar tu riesgo de demencia en un asombroso 70%, en un estudio reciente.
La contaminación del aire ha estado ocupando más titulares últimamente, ya que los gobiernos de toda Europa, así como el resto del mundo, aún no están abordando directamente la amenaza global para la salud tan intensamente como deberían.
Informes publicados el año pasado reiteraron la noción de que la contaminación del aire es mucho más peligrosa de lo que pensamos. Euro Weekly News cubrió recientemente una historia que mostraba la gran cantidad de muertes atribuidas a sustancias peligrosas como PM2.5 provenientes de gases industriales y escapes de automóviles en Europa, y fue un shock para todos.
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Las diminutas partículas encontradas en muchos contaminantes del aire como los humos de escape, las emisiones de gases de fábricas y la quema de carbón, identificadas como PM2.5, ahora representan una amenaza adicional para la salud pública, ya que un estudio reciente ha relacionado directamente la sustancia con un mayor riesgo de demencia.
Estudio en Suecia encontró un aumento del 70% en la demencia cuando se está expuesto a PM2.5
El estudio fue publicado en Neurology y está disponible en línea. Los investigadores siguieron a casi 3,000 personas mayores que vivían en la capital sueca. 376 de ellos desarrollaron demencia a lo largo del proyecto de investigación, que duró un total de 12 años.
Los participantes fueron estudiados en muchas métricas diferentes, como hábitos alimenticios, estilo de vida y estrés, pero una destacó: la exposición a la contaminación del aire.
Dado que los participantes daban muestras de sangre y cabello, escáneres cerebrales, encuestas y cuestionarios sobre sus hábitos de vida y diversas pruebas durante el estudio, los científicos notaron una correlación alarmantemente frecuente.
Los hallazgos revelaron que aquellos que desarrollaron demencia tenían niveles ligeramente elevados de PM2.5 en su sangre, mientras que los que no desarrollaron la enfermedad neurodegenerativa tenían menos cantidad presente.
Los individuos evaluados que desarrollaron demencia tenían una presencia marcadamente mayor de placas de amiloide en su cerebro, uno de los principales marcadores de la condición.
Los investigadores concluyeron que incluso un pequeño aumento en la exposición a PM2.5 en comparación con el nivel seguro global aumentó el riesgo de desarrollar demencia en un 70%. Esto debería servir como una llamada de atención para los líderes de los países europeos y señalar el inicio de una campaña para minimizar las emisiones mortales de automóviles, fábricas y hogares tradicionales que utilizan carbón para la calefacción.
¿Qué es exactamente la demencia y cuáles son los signos?
La demencia es un término general para una serie de diversas enfermedades neurodegenerativas, siendo la más común la enfermedad de Alzheimer. La condición comienza y se desarrolla incontrolablemente cuando las placas de amiloide comienzan a formarse en el cerebro, y la presencia de proteínas tau comienza a formarse y aumentar. Estos dos elementos combinados resultan en una “deterioración” del cerebro, con las células cerebrales dañadas y la atrofia real del tejido cerebral también tomando forma.
Los síntomas principales de la condición están asociados con los de la disminución cognitiva, que incluyen pérdida de memoria, confusión, mala percepción del espacio y mala coordinación, entre otros.
La preocupante condición afecta más comúnmente a personas mayores de 75 años, pero ha habido casos reportados de individuos que desarrollan síntomas tan temprano como los 30 años.
Afortunadamente, hay varias cosas que puedes hacer para prevenir o retrasar el inicio de la demencia
Come los alimentos adecuados: Alimentos como pescado, productos lácteos y carne, así como frutas y verduras, contienen vitaminas y minerales necesarios para que tu cuerpo luche contra el estrés oxidativo y la inflamación, y aumente la presencia de antioxidantes en tu cuerpo y cerebro.
Ejercítate tanto como puedas: El ejercicio promueve la presencia de endorfinas, que pueden reducir directamente la amenaza de los radicales libres en tu cuerpo. Estos son causados por el estrés oxidativo y amenazan debilitar el sistema inmunológico y contribuir a la inflamación.
Reduce tus niveles de estrés diarios: Demasiado estrés, a largo plazo, aumenta tus niveles de cortisol. Esto pone tu cuerpo en un estado constante de lucha o huida, y se aleja de la capacidad natural del cuerpo para sanar y regenerarse. El estrés también contribuye a los niveles de inflamación.
Monitorea los niveles de contaminación del aire en tu área: La mayoría de los teléfonos tienen una aplicación meteorológica que te permite rastrear los niveles de calidad del aire en tu área. Si ves rojo o amarillo, se recomienda abstenerse de actividades al aire libre si puedes, especialmente las que son extenuantes y requieren una mayor ingesta de aire.
Suplementación: Se ha demostrado científicamente que el hongo melena de león ayuda en la lucha contra la demencia, y muchos consideran que el suplemento, que es un hongo culinario también disponible en forma de polvo o cápsula, es el primero en su tipo en prevenir realmente la demencia. Permite que ocurra el factor neurotrófico derivado del cerebro, o BDNF, y a su vez puede aumentar el factor de crecimiento de los nervios, o NGF. Esto puede ayudar a que se desarrollen nuevas células cerebrales y promover la neurogénesis.
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