En sus dos primeros álbumes – Guppy de 2017 y Young Enough de 2019 – Charly Bliss de Brooklyn intercambiaba varias combinaciones de sonidos dulces y salados. Pop-punk, bubblegum-grunge, powerpop: cualquiera que fuera la combinación, la conclusión era que se trataba de un grupo alternativo con sensibilidades pop, siempre en ese orden. El tercer álbum, Forever, llega después de un período de cambios; la vocalista Eva Hendricks se mudó a mitad del mundo a Australia, mientras que su hermano baterista Sam se convirtió en padre de dos niños. Cuando se reunieron para escribir música, han dicho anteriormente que “tenía que ser divertido”.
Forever definitivamente logra esa misión, pero también, por primera vez, pone sin tapujos el lado pop de Charly Bliss en primer lugar. Las emociones eufóricas de la destacada Calling You Out se elevan como si Carly Rae Jepsen fuera una banda, mientras que puedes imaginar a Olivia Rodrigo dando un buen intento a la angustia juvenil en forma de balada de poder de Nineteen. Todo en el disco, desde la entrega vocal emo de I Don’t Know Anything hasta el cierre casi perdonablemente cursi de Last First Kiss, se presenta con niveles de emoción de alto riesgo, dispuestos a ponerlo todo ahí afuera. Si en ocasiones el álbum podría beneficiarse de un poco más de matices, en su mayor parte su espíritu de ojos abiertos gana.