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Pensando en qué escribir para la columna de esta semana, me di cuenta de que no he ido a ningún lugar de hamburguesas desde hace mucho tiempo, y hace aún más tiempo que no como ninguna smash burger. Un amigo mío me habló maravillas de Klüg, así que fui allí con grandes expectativas.
Llegué justo antes de las 8 de la tarde un miércoles; el lugar parecía vacío, pero casi estaba completamente reservado. Una camarera encantadora encontró una de las últimas mesas libres y, mientras me acomodaba, más personas empezaron a llegar. En 30 minutos el lugar estaba lleno, así que diría que incluso si vas en una noche de entre semana aleatoria, llama con antelación y reserva tu mesa.
Pedí un Aquarius sabor limón y empecé a estudiar su corto menú. Todo parecía delicioso, algunos clásicos y algunas combinaciones de ingredientes bastante únicas que no había probado antes. Al final, le pedí a otro camarero sonriente una recomendación y él sugirió que probara The G.O.A.T. Normalmente asocio este acrónimo con un cierto jugador de tenis – estoy seguro de que todos pueden adivinar a quién me refiero – pero aquí era el nombre de la hamburguesa especial de la semana. ¿O tal vez del mes?
De cualquier manera, estaba hecha con una smash burger de 100g de carne, queso de cabra a la parrilla, tiras de pimiento rojo, verde y amarillo, bacon crujiente, salsa de mostaza y miel y reducción de vino Pedro Ximénez – era grande, jugosa y llena de sabor. Si tenías mucha hambre, podías elegir 2 o 3 hamburguesas de 100g en lugar de solo una. Pero para mí, esto era suficiente. Opté por patatas fritas de boniato con mi hamburguesa, y también estaban geniales – crujientes por fuera, tiernas por dentro y no demasiado saladas como a veces sucede en otros lugares de hamburguesas. Realmente disfruté mucho de esta comida sencilla, con unos pocos ingredientes innovadores, y la bebida deportiva Aquarius, supuestamente “no tan mala para nosotros”.
Por lleno que estuviera, no iba a irme sin probar un postre. Me dijeron que todos sus postres eran caseros y había una elección de tres: tarta chocotorta, tarta de queso de lotus y una tarta del mes, que era una tarta de queso de pistacho. Opté por esta última, pensando que podría probar cualquiera de las dos restantes en otra ocasión. ¡Estaba absolutamente deliciosa! Desde el primer bocado estaba claro que era realmente casera, con los mejores ingredientes posibles. Era curioso ver que – entre la última locura por el chocolate de Dubai – aún podías encontrar un postre de pistacho que no mencionaba Dubai en su nombre.
Mientras saboreaba el postre, miraba a mi alrededor… El interior era genial, con un ligero toque industrial – paredes expuestas, particiones de hormigón, vigas de madera negra junto con mesas de madera y sillas de metal negro. Letreros de neón y obras de arte temáticas de hamburguesas completaban el aspecto. Con personal amable vestido de negro y música de grupos como Red Hot Chilli Peppers, Klüg tenía una especie de ambiente rock que me encantaba. Los invitados eran una mezcla de parejas jóvenes en citas, tres generaciones de una familia y grupos de amigos…
Estaba curioso por el nombre – Klüg – y me dijeron que era un juego con la palabra alemana Glück, que significa felicidad. Bueno, todo este lugar, incluyendo la comida y el personal, me parecía bastante feliz. Ya estoy pensando en reunir a algunos amigos y regresar lo antes posible.
El Veredicto:
Hamburguesa deliciosa, excelente postre casero, interior genial y servicio amigable… ¡Definitivamente quiero volver y probar más de su menú!
El Lugar:
Klüg Burgers
Carrer Comte de Barcelona, 22, Ponent, 07013 Palma, Illes Balears
Tel: 607 73 72 32
Instagram: @klug.burgers
Horario de apertura:
Lunes a jueves 6pm-11.30pm
Viernes 6pm-medianoche
Sábado y domingo 1.30pm-4pm, 7.30pm-medianoche
La Cuenta:
Menú que incluye una hamburguesa, patatas fritas y una bebida 19 euros
Tarta de queso casera 6.50 euros
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