Cafeterías en Palma

Si estás buscando un cortado a un precio razonable en Palma, hay algunas zonas que es mejor evitar. Como regla general, cuanto más te alejes del casco antiguo hacia las afueras, más barato será. Bares españoles tradicionales como Pigalle, Mavi y Vista Alegre en la Calle 31 de Desembre ofrecen cortados por alrededor de 1,40 euros, más o menos unos pocos céntimos. Estos son ejemplos clásicos de lo que los locales llaman “bares de toda la vida”.

Esta regla también se cumple en las calles peatonales de Blanquerna y Nuredduna, que siguen siendo mayormente libres de turistas incluso en verano. En Blanquerna, el bar Zaguán es un destacado, mientras que en Nuredduna, el bar de estilo vintage Bar Mónaco es perfecto para amantes del café con presupuesto limitado y gusto por el encanto retro. Incluso se pueden encontrar cortados más baratos alrededor de la Plaza de las Columnas cerca de Nuredduna, en el barrio multicultural de Pere Garau, o a lo largo de la calle Aragón, donde varios bares españoles dirigidos por chinos ofrecen una excelente relación calidad-precio.

El Casco Antiguo: Una Opción Más Costosa

Los precios de los cortados aumentan significativamente en el casco antiguo de Palma. Una excepción asequible es el Café Barroco, donde puedes disfrutar de un cortado por 1,50 euros mientras te diviertes con juegos de mesa. Los cafés alrededor de la Plaça d’en Coll, cerca de la zona peatonal del Sindicato, también mantienen los precios relativamente bajos, con cortados que cuestan alrededor de 2 euros. Sin embargo, en áreas más exclusivas del casco antiguo, como Rambla, el Borne, Calle Unión o Plaza Mercat, los precios del café se disparan.

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Aquí, los turistas y los locales más adinerados frecuentan los cafés, y gastar unos euros extra en café es la norma. Los cortados en estas áreas, así como en Santa Catalina fuera del centro de la ciudad, a menudo cuestan 2,50 euros o más. Mientras tanto, la turística Plaza Mayor es famosa por sus bares con precios excesivos, considerados desde hace mucho tiempo trampas para turistas.

Donde los Precios Realmente se Disparan

Las cafeterías de cadena de capuchino, populares entre los visitantes internacionales, se encuentran entre las opciones más caras. Sus menús a menudo están orientados hacia los turistas de habla inglesa, y ni siquiera ofrecen cortados. En su lugar, un café con leche te costará 4,40 euros, más de lo que pagarías en los lugares más caros de Portitxol. Esta zona de moda atrae a europeos centrales y del norte, así como a españoles de clase media, que están dispuestos a derrochar en su café.