Israel anuncia una pausa diaria en algunos enfrentamientos. El ejército israelí dijo ayer que suspendería las operaciones militares diurnas cerca de un cruce fronterizo en el sur de Gaza “hasta nuevo aviso”. El movimiento es un esfuerzo para permitir que más ayuda humanitaria entre en el enclave, ya que los grupos de ayuda hacen advertencias cada vez más urgentes sobre la falta de alimentos y otros bienes básicos.
El anuncio, hecho en el día festivo musulmán Eid al-Adha, se produce en medio de una serie de negociaciones, mediadas por Estados Unidos, Qatar y Egipto, para llegar a un alto el fuego. Un punto de discordia en esas conversaciones es un desacuerdo sobre la permanencia de cualquier cese de hostilidades.
El ejército de Israel subrayó ayer que la pausa sería limitada, que su ofensiva en Rafah continuaría y que no habría “cese de los combates” en el sur de Gaza en general.
El gobierno sugirió que el primer ministro, Benjamin Netanyahu, se enteró de la pausa solo a través de informes de noticias y señaló su desaprobación. Pero los analistas dijeron que es probable que Netanyahu estuviera al tanto del plan y del mensaje de su implementación, cada uno adaptado a diferentes audiencias.
