Un tribunal ha condenado al autor de un crimen de violencia doméstica a compensar a dos agentes de la Guardia Civil que fueron atacados cuando intentaban contenerlo. La sentencia de un tribunal en Torrevieja ha servido como argumento para que la Asociación de Guardias Civiles (AUGC) exija que el Gobierno reconozca la función de la Guardia Civil como “una profesión de riesgo”, una condición que las fuerzas de policía locales ya tienen, así como para denunciar el aumento de los ataques a miembros de las fuerzas de seguridad del Estado, y para solicitar medidas de refuerzo en el código penal que permitan una mayor protección de los agentes.
Los hechos tuvieron lugar en mayo de 2023 en Torrevieja cuando una mujer denunció a su hijo por un delito de violencia doméstica, bloqueando la puerta principal de la casa con muebles.
Varias patrullas de la Guardia Civil se encontraron en la propiedad con insultos y amenazas por parte del agresor, quien se negó a cooperar y persistió en su negativa a abrir la puerta, por lo que los agentes tuvieron que solicitar la presencia de un cerrajero.
Una vez que se abrió la puerta y mientras los agentes intentaban ganar acceso a la casa, el hombre comenzó a golpear al oficial que entró primero, por lo que los otros agentes tuvieron que intervenir para contenerlo. Finalmente, fue reducido y esposado.
El Juzgado de lo Penal Número 4 de Torrevieja lo encontró culpable de agredir a dos agentes, por lo que fue condenado a ocho meses de prisión y multas para cada uno de los agentes agredidos por un total de 1.080 euros y 1.930 euros.
La AUGC de Alicante afirma que según los datos del Sistema Estadístico de Criminalidad del Ministerio del Interior, el año 2023 cerró con 16.762 ataques a sus miembros, superando los datos de 2022 en un 0,66%, una cifra que casi con seguridad se superará una vez más en 2024.