Los soldados patrullan afuera de la estación de tren Gare du Nord en los Juegos Olímpicos de París 2024, el viernes 26 de julio de 2024, en París, Francia. A pocas horas de la gran ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos, el tráfico de trenes de alta velocidad hacia la capital francesa se vio severamente interrumpido el viernes por lo que las autoridades describieron como “acciones criminales” y sabotaje. (Foto de AP/Mark Baker)
PARÍS— Incendiarios atacaron la red ferroviaria de alta velocidad francesa temprano el viernes, paralizando los viajes a París desde el resto de Francia y Europa para unas 800,000 personas, incluidos atletas olímpicos que se dirigían a la gran ceremonia de apertura de los Juegos en la noche.
Las autoridades francesas condenaron los ataques como “acciones criminales”, aunque dijeron que no había indicios de una conexión directa con los Juegos. Los fiscales en París abrieron una investigación nacional diciendo que los crímenes —entre ellos daños materiales que amenazan los “intereses fundamentales” de la nación— podrían acarrear penas de 10 a 20 años.
“Es una forma terrible de comenzar los Juegos Olímpicos”, dijo Sarah Moseley, una viajera de 42 años esperando en la estación de Gare du Nord en París mientras se enteraba de que su tren a Londres estaba retrasado por el caos en los raíles.
Mientras las autoridades de París se preparaban para un desfile espectacular en y a lo largo del río Sena, se reportaron tres incendios antes del amanecer cerca de las vías en las líneas de alta velocidad de Atlantique, Nord y Est, causando interrupciones que afectaron a cientos de miles de viajeros.
Entre ellos estaban los propios atletas olímpicos.
Dos de los cuatro trenes que transportaban a atletas olímpicos a París en la línea de alta velocidad Atlantique occidental se detuvieron horas antes de la ceremonia de apertura programada para las 7:30 p.m. hora local (1730 GMT), afectados por el sabotaje coordinado en las vías, dijo un funcionario del operador ferroviario francés SNCF el viernes.
Además, dos atletas alemanes de salto ecuestre que se dirigían en tren a París para la ceremonia de apertura —Philipp Weishaupt y Christian Kukuk— tuvieron que regresar en Bélgica debido a los cierres, informó la agencia de noticias alemana dpa.
La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, dijo que los masivos ataques a las arterias ferroviarias de alta velocidad de Francia hacia París no tendrían “impacto en la ceremonia de apertura” de los Juegos, aunque los cielos nublados y la lluvia pronosticada también estaban empañando el ambiente cuando los Juegos tan esperados estaban a punto de comenzar.
No se reportaron lesiones conocidas por los ataques.
El primer ministro francés, Gabriel Attal, dijo que los servicios de inteligencia de Francia han sido movilizados para encontrar a los responsables de los “actos de sabotaje” que describió como “preparados y coordinados”.
Attal dijo que las acciones tenían “un objetivo claro: bloquear la red de trenes de alta velocidad”. Dijo que los vándalos apuntaron estratégicamente a rutas desde el norte, este y oeste hacia París horas antes de la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos.
Fue “un ataque premeditado, calculado, coordinado” que indica “un deseo de dañar seriamente” al pueblo francés, dijo el director ejecutivo de la empresa ferroviaria nacional SNCF, Jean-Pierre Farandou.
“Los lugares fueron especialmente elegidos para tener el mayor impacto, ya que cada incendio cortó dos líneas”, dijo Farandou.
Los trabajadores de mantenimiento de ferrocarriles lograron frustrar un presunto intento de sabotaje a lo largo de las vías que se dirigían al sureste de París, dijo Farandou.
Los trabajadores en el turno nocturno vieron intrusos y alertaron a la policía, dijo Farandou. “Estas personas se fueron, por supuesto, muy rápidamente cuando se dieron cuenta de que habían sido descubiertas. Así que, gracias a los trabajadores ferroviarios”, dijo Farandou. “Desafortunadamente, no pudimos hacerlo en todas partes”.
Farandou dijo que se estaban realizando reparaciones mientras la policía realizaba exámenes forenses y buscaba a los responsables. Dijo que los incendios se prendieron predominantemente en tuberías que contenían cables de señalización críticos. “Tenemos que reparar cable por cable, así que es un trabajo muy meticuloso”, dijo Farandou.
El ministro de Transporte de Francia, Patrice Vergriete, dijo que el tráfico ferroviario estaba comenzando a reanudarse por la tarde, especialmente en la línea de Atlantique, que había sido completamente detenida. “En la estación de Montparnasse y en la estación de Burdeos, que fueron las más afectadas, deberíamos encontrar uno de cada tres trenes funcionando esta tarde. Las cosas ya están mejorando”, dijo.
El ataque ocurrió en medio de tensiones globales y medidas de seguridad reforzadas mientras la ciudad se preparaba para los Juegos Olímpicos de París. Muchos viajeros planeaban converger en la capital para la ceremonia de apertura, y muchos vacacionistas también estaban en tránsito.
Esta semana, el ministro del Interior de Francia dijo que alrededor de 1,000 personas sospechosas de posiblemente interferir en nombre de una potencia extranjera habían sido bloqueadas de asistir a los juegos.
Aunque ha señalado repetidamente sospechas de interferencia respaldada por Rusia, Gérald Darmanin agregó que tales amenazas también han provenido de otros países que no nombró. Entre los bloqueados se encontraban personas sospechosas de radicalización islámica o extremismo político de izquierda o derecha, o que tenían antecedentes penales significativos, dijo Darmanin.
Los ataques coordinados a las líneas de tren se dirigieron a lugares remotos lejos de la capital, donde 35,000 agentes de policía están siendo desplegados cada día para los Juegos, con un pico de 45,000 para la ceremonia de apertura.
Las autoridades francesas han dicho que han frustrado varios planes para interrumpir los Juegos Olímpicos, incluida la detención de un hombre ruso sospechoso de planear desestabilizar los juegos.
París ha sido blanco de ataques terroristas mortales en la última década, y algunos funcionarios franceses vieron la celebración de los Juegos Olímpicos como una oportunidad para que la nación se cure de años de trauma.
La prefectura de policía de París “concentró su personal en las estaciones de tren parisinas” después del “ataque masivo” que paralizó la red de trenes de alta velocidad TGV, dijo Laurent Nuñez, el jefe de la policía de París, a France Info televisión.
También el viernes, el aeropuerto francés de Basilea-Mulhouse en la frontera con Alemania y Suiza fue evacuado por la mañana y cerrado brevemente “por razones de seguridad”, dijo el aeropuerto. No estaba claro si había una conexión con los ataques ferroviarios.
Las interrupciones afectaron especialmente a la estación de Montparnasse de París.
En el bullicioso vestíbulo de la estación, Maiwenn Labbé-Sorin dijo que pasó horas varada en un tren antes de regresar a París.
“Estuvimos dos horas sin agua, sin baños, sin electricidad”, dijo. “Luego pudimos salir a la vía por un rato y luego el tren regresó. Ahora no estoy segura de qué va a pasar”.
Muchos pasajeros en la Gare du Nord, una de las estaciones de tren más transitadas de Europa, estaban buscando respuestas y soluciones el viernes por la mañana. Todas las miradas estaban puestas en los tableros de mensajes centrales ya que la mayoría de los servicios hacia el norte de Francia, Bélgica y el Reino Unido estaban retrasados.
El operador ferroviario nacional de Alemania, Deutsche Bahn, dijo que también hubo cancelaciones repentinas y retrasos de trenes entre Francia y Alemania.
Los problemas surgieron antes de una ceremonia de apertura en la que se esperaba que 7,000 atletas olímpicos navegaran por el Sena pasando por monumentos icónicos de París como la Catedral de Notre-Dame, el Museo del Louvre y el Museo de Orsay.
“Perturbar un festival de paz con actos de violencia nunca puede ser aceptado y exige el rechazo más decidido”, dijo el canciller alemán Olaf Scholz, hablando en París antes de la ceremonia de apertura. “Espero que las autoridades francesas pronto logren identificar a los responsables”.
Un destacado caricaturista francés, Plantu, encontró inspiración en la rápida respuesta de la red ferroviaria. Publicó una viñeta en Instagram que muestra las primeras tres medallas de oro olímpicas yendo a los agentes de la SNCF. Tres agentes fueron dibujados en el podio olímpico, sosteniendo cables y trenes, con medallones de oro colgando alrededor de sus cuellos.
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