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Un “masivo” ataque incendiario causó estragos en las vías férreas de Francia horas antes de la Ceremonia Olímpica el 26 de julio; mientras miles de pasajeros lidian con las interrupciones, las autoridades están “listas” para enfrentar a los criminales.
No parte del plan
A pesar de siete años de preparativos y un costo de €414 millones en operaciones de seguridad, los Juegos Olímpicos de París se lanzaron con el colapso sin precedentes del sistema ferroviario y preocupaciones de seguridad.
Justo horas antes de la gran procesión en el río Sena, los incendios en aumento detuvieron los trenes, afectando al menos a 800,000 pasajeros, incluidos atletas olímpicos y fervientes espectadores en camino a los Juegos.
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Los pasajeros se acumularon, perplejos y esperando, mientras los servicios ferroviarios entre París y Londres se vieron afectados por actos de vandalismo. Los trenes continuaron siendo cancelados mientras Eurostar aconsejaba a los pasajeros abstenerse de viajar más.
Al mismo tiempo, un aeropuerto franco-suizo, EuroAirport, fue evacuado debido a una amenaza de bomba pero ahora ha vuelto a funcionar. El operador ferroviario, SNCF, declaró que se realizaron interrupciones en las líneas de TGV de alta velocidad que conectan París con el oeste, norte y este de Francia; afectando a casi todo el país.
Se abrió de inmediato una investigación formal, según declaró el Primer Ministro de Francia, Gabriel Attal; “los servicios de inteligencia y las fuerzas del orden están movilizados para encontrar y castigar a los autores de estos actos criminales.”
El criminal detrás
Las autoridades francesas no han recibido ninguna reclamación de responsabilidad, ya que afirmaron no tener nombres de los sospechosos, pero se hicieron muchas afirmaciones tanto por parte de funcionarios gubernamentales como de la prensa internacional.
Aunque los expertos admiten que es una idea descabellada, la palabra sobre un “espía ruso” continúa propagándose por temor. El analista de seguridad, Alex Kokcharov, dijo a la prensa; “Rusia tiene la intención y la capacidad de intentar actos de sabotaje en Europa, especialmente en Francia. La intención rusa está en gran medida vinculada al hecho de que Rusia no fue invitada a los Juegos Olímpicos.”
Aunque parezca una medida extrema motivada por un resentimiento infantil por parte de Rusia, las autoridades francesas informaron que el sospechoso Kirill Gryaznov era un espía ruso. El hombre fue detenido en París y acusado de trabajar para el FSB; la agencia de inteligencia interna de Putin.
El presunto, sin embargo, negó los cargos y afirmó que trabaja en reality TV y solo estaba camino “a la ceremonia de apertura como ningún otro,” cuando la policía lo capturó.
Hoy en día, los espías rusos son un sospechoso cotidiano en toda la UE y los países continúan haciendo afirmaciones infundadas, como lo hizo el ministro de Transporte de la República Checa en abril de este año, advirtiendo a la UE que el Kremlin ha tenido “miles de intentos de debilitar nuestros sistemas,” desde 2022.
Otro posible sospechoso son los extremistas iraníes; el 25 de julio, el Ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Israel Katz, alertó al ministerio de relaciones exteriores francés de un posible ataque terrorista durante los Juegos Olímpicos. El Ministro declaró; “Tenemos inteligencia que indica que operativos iraníes y otros grupos terroristas planean atacar a miembros de la delegación israelí y turistas israelíes.”
El mismo día, un hombre de 18 años de Gironde, Francia, fue arrestado después de que la policía encontrara evidencia de que seguía ideologías yihadistas. Según los medios locales, se había comunicado con otro hombre de 18 años que fue arrestado, sobre cometer una “acción violenta” contra los Juegos Olímpicos.
Lo que está por venir
“Estamos enfocados y listos,” dijo el General Lionel Catar, uno de los planificadores militares antes de la apertura de los Juegos Olímpicos. Mientras 75,000 soldados, guardias y policías salían a las calles de París, la operación de seguridad de los Juegos Olímpicos se convirtió en el despliegue de fuerzas de seguridad en tiempo de paz más grande de la historia de Francia.
La Autoridad de Aviación Civil de Francia declaró; “Se crea un área prohibida temporal para garantizar la implementación de los arreglos especiales de seguridad aérea como parte de la protección de la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París 2024.” Todos los aeropuertos de París permanecerán cerrados desde temprano en la noche hasta la medianoche por temor a un posible ataque.
En medio de los eventos sin precedentes, la antorcha olímpica comenzó a hacer su camino por París, con la esperanza de días mejores y más seguros por delante.
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