El hombre que irrumpió en la casa de la ex presidenta de la Cámara Nancy Pelosi y atacó a su esposo con un martillo ha sido condenado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional por cargos estatales en California. David DePape también fue condenado por cargos federales en mayo, lo que resultó en una sentencia de 30 años de prisión que ahora se cumplirá de forma concurrente. En el juicio estatal, un jurado de San Francisco encontró a DePape culpable de secuestro, allanamiento de morada en primer grado y detención ilegal de un anciano. El ataque dejó a Paul Pelosi, ahora de 84 años, en el hospital durante seis días con un cráneo fracturado y otras lesiones. En una declaración después de la sentencia, la familia Pelosi dijo que “se ha hecho justicia legal”. Desde el violento allanamiento y los gritos de ‘¿dónde está Nancy?’ hace dos años, no pasa un día en que no pensemos en este devastador asalto, su trauma, o la posibilidad de futuros ataques”, dijo la familia. Añadieron que esperan que la sentencia envíe un mensaje de que la violencia política contra funcionarios electos o sus familiares no será tolerada. Un abogado de DePape dijo que planea apelar la sentencia del martes. “Este fue un final realmente trágico para una historia trágica”, dijo el abogado Adam Lipson a los reporteros después de la audiencia. El Sr. Lipson había solicitado sin éxito al juez que dictara una sentencia más indulgente, argumentando que DePape sufría de problemas de salud mental y aislamiento, lo que, según él, lo hacía vulnerable a la propaganda. El juez Harry Dorfman se negó, diciendo que no sentía simpatía por DePape. “Siento simpatía por la víctima en este caso, que tiene suerte de estar viva”, dijo el juez Dorfman al dictar la sentencia. “Mi intención es que el Sr. DePape nunca salga de prisión, nunca pueda ser liberado condicionalmente”. Un video del incidente que se mostró durante el juicio anterior mostró a DePape, un ciudadano canadiense que ha vivido en los EE. UU. durante dos décadas, irrumpiendo en la casa de los Pelosi en California armado con un martillo el 28 de octubre de 2022. DePape preguntó por la Sra. Pelosi, que no estaba en casa, cuando se enfrentó al esposo del legislador dentro de la casa de la pareja. Cuando los oficiales de policía llegaron después de responder a una llamada al 911, encontraron al Sr. Pelosi y a DePape agarrando ambos el martillo. Momentos después, después de que se le pidiera que soltara el arma, DePape golpeó abruptamente al Sr. Pelosi antes de ser derribado por los agentes. El incidente fue capturado por las cámaras corporales usadas por los oficiales. Además de su cráneo fracturado, el Sr. Pelosi sufrió lesiones en su brazo y mano. Fue golpeado tres veces durante el ataque. El atacante admitió durante su juicio federal que planeaba retener a la Sra. Pelosi como rehén, interrogarla en cámara y “romperle las rodillas” si no admitía lo que él afirmaba eran sus mentiras. La hija de la Sra. Pelosi, Christine, leyó una carta escrita por su padre, en la que dijo que el ataque le dejó con daño en los nervios y con miedo de dormir solo en casa. Cuando se le dio la oportunidad de dirigirse al tribunal en el juicio estatal, DePape habló extensamente sobre teorías de conspiración en torno al ataque del 11 de septiembre de 2001, según informó Associated Press, cuyos reporteros estaban dentro de la sala del tribunal. DePape también dijo que creía que sus abogados designados por el gobierno estaban conspirando en su contra, según reportó AP, lo que obligó al juez a interrumpirlo varias veces.
