El Ayuntamiento de Alicante está instando al Gobierno español a instalar un radar meteorológico en la provincia para predecir y mitigar mejor los efectos de las fuertes lluvias e inundaciones.
El Ayuntamiento de Alicante está instando al Gobierno español a instalar un radar meteorológico en la provincia para predecir y mitigar mejor los efectos de las fuertes lluvias e inundaciones. A pesar de ser muy propensa a fenómenos como las Danas (gotas frías), Alicante actualmente depende de datos de radares en Murcia y Valencia.
Propuesta al Gobierno
El 19 de diciembre, el Ayuntamiento presentará una declaración institucional solicitando que el Ministerio para la Transición Ecológica incluya un radar para Alicante en su plan nacional para implementar 13 nuevos radares meteorológicos. El Ayuntamiento destaca que dicho radar es “vital” para obtener datos oportunos y localizados que podrían salvar vidas durante eventos climáticos extremos.
El radar complementaría el Sistema Integrado de Prevención y Alerta Contra Inundaciones de Alicante (Sipaid) y el recién establecido Comité Técnico de Evaluación de Riesgos, que tiene como objetivo coordinar esfuerzos en todos los niveles de gobierno para mejorar la seguridad pública y minimizar los daños.
Inundaciones Históricas y Esfuerzos de Mitigación
Las condiciones geográficas de Alicante, que incluyen 400 km de cuencas naturales, pendientes pronunciadas y áreas urbanizadas, la hacen vulnerable a precipitaciones repentinas e intensas, especialmente durante finales de verano y otoño. Episodios pasados, como la inundación de 1997 que registró 266 l/m² de lluvia en siete horas, llevaron a la ciudad a implementar extensas medidas de control de inundaciones.
Desde 1997 hasta 2005, se llevaron a cabo importantes proyectos de infraestructura hidráulica, incluyendo 109 km de colectores, embalses anti-contaminación y el innovador Parque La Marjal. Estas medidas han mejorado significativamente el drenaje y la resistencia a las inundaciones.
Planes Futuros y Beneficios del Radar
Se están realizando planes para agregar tres parques inundables y 12 nuevos tanques de retención a la infraestructura de la ciudad. Un radar meteorológico dedicado mejorarían estos esfuerzos al proporcionar pronósticos precisos y localizados, permitiendo a las autoridades actuar de manera proactiva durante el mal tiempo, y reduciendo aún más los riesgos para la población.
El llamado de Alicante para esta infraestructura crítica subraya su compromiso de proteger a los residentes y mitigar los impactos devastadores de eventos climáticos extremos.