La ley de la eutanasia en España lleva tres años en vigor, ayudando a más de 1,500 personas a morir con dignidad. En Alicante, más de la mitad de las solicitudes de eutanasia son aprobadas, con dos tercios atribuidos a cáncer o enfermedades neurológicas. La mayoría de los solicitantes tienen entre 70 y 79 años, con un tiempo promedio de procesamiento de 67 días.
La ley de eutanasia en España ha estado en vigor durante tres años, ayudando a más de 1,500 personas a morir con dignidad. Las solicitudes han aumentado, creciendo en un cuarto el año pasado en comparación con 2022. En la Comunidad Valenciana, se presentaron 56 solicitudes, con un 46% (26) aprobadas de manera igualitaria entre hombres y mujeres.
El ‘Informe de Evaluación Anual 2023 del Ministerio de Salud sobre la Prestación de Ayuda en la Muerte’ destaca el perfil común de los solicitantes: aquellos de entre 70 y 79 años (28%) con cáncer o enfermedades neurológicas (35% cada uno). Aunque el 95% de los solicitantes tenían la capacidad para solicitarla, el 15% corría el riesgo de perder esta capacidad inminentemente. El tiempo promedio desde la solicitud hasta la muerte fue de 30 días, con un 25% falleciendo antes de que se resolviera su solicitud.
Los servicios de eutanasia se proporcionan principalmente en atención primaria y salud pública, con un 47% en hospitales y un 44% en los hogares de los pacientes. Solo un 3% de los solicitantes cambian de opinión, y un 12.5% optan por la donación de órganos. A pesar de una tasa de denegación del 24%, el 58% de estas denegaciones fueron revocadas tras apelación. La mayoría de los solicitantes solicitan la administración directa de medicamentos por parte del equipo médico.