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El Instituto Nacional de Estadística estima que hay alrededor de 100.000 viviendas vacías en las Islas Baleares, aproximadamente una sexta parte de todo el parque de viviendas. Lograr que incluso un porcentaje de estas viviendas vacías lleguen al mercado ayudaría a aliviar los problemas de vivienda en las islas, por lo que el gobierno lanzará un plan de vivienda en alquiler que implicará actuar como si fuera una agencia de alquiler.
Conocido como Alquiler Seguro, dos medidas clave serán una garantía de pagos de alquiler a precios de mercado a los propietarios y una garantía de que las propiedades serán devueltas en las mismas condiciones en las que se introdujeron en el programa. Los precios variarán dependiendo de la situación del mercado en los municipios individuales.
El gobierno espera que este plan convenza a los propietarios de poner viviendas disponibles en alquiler al eliminar las preocupaciones de que los inquilinos incumplan los pagos y se conviertan en ocupantes ilegales. Establecerá acuerdos con agencias inmobiliarias o empresas de administración de propiedades para los pagos a los propietarios.
Según el plan, las propiedades deberán haber estado vacías durante al menos seis meses, deben estar en buenas condiciones para ser alquiladas de inmediato y tener al menos tres años de antigüedad. También deben ser para alquiler permanente y residencial, eliminando así la posibilidad de ser alojamiento turístico.
Excluidas del programa estarán las propiedades pertenecientes a grandes propietarios, como bancos o fondos de inversión.
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