Advertencia para conductores en España después de que pandillas asaltan y roban a turistas en estos servicios de autopista.

Una docena de bandas organizadas están robando a turistas extranjeros ‘a diario’ en áreas de servicio de autopistas en las regiones de Valencia y Murcia, según la Guardia Civil.

Los robos y robos violentos han aumentado durante el verano en las áreas de descanso de las autopistas A-7 y AP-7.

Ha habido 75 arrestos en los últimos dos años y la mayoría son reincidentes que utilizan identidades falsas.

La Guardia Civil dice que el grupo criminal más grande está compuesto por varias familias relacionadas originarias de un pequeño pueblo rumano llamado Chitila.

La banda tiene su base en Málaga y en ciudades de la Comunidad Valenciana, especializándose en robos en áreas de servicio durante la noche.

Desde 2021, se han detenido a 43 presuntos miembros de la banda de Chitila, mientras que otros tres grupos de ladrones rumanos con antecedentes en España también han estado operando.

Tres otras bandas de robos en autopistas están compuestas por argelinos y otras tres por albanokosovares que también tienen como objetivo a las víctimas en centros comerciales.

Un informe de inteligencia criminal de la Guardia Civil dice que aquellos arrestados o identificados por robos en la A-7 y AP-7 acumulan un ‘gran número’ de arrestos por delitos constantes.

Muchos de ellos comenzaron a delinquir en España antes de 2010, mientras que otros han formado grupos itinerantes y tienen antecedentes penales en varios países europeos en los últimos cinco años.

La mayoría de las víctimas son turistas europeos que pasan el verano en la Comunidad Valenciana o ciudadanos de Argelia o Marruecos que están utilizando la autopista.

Desde el verano de 2021, la Guardia ha notado un gran aumento en los robos en autopistas y cree que los no españoles son un blanco perfecto.

LEAR  Protestas contra el turismo se extenderán 'absolutamente' en España y Europa a menos que se aborden las preocupaciones locales, advierte funcionario de la UNESCO.

Esto se debe a que si han sido víctimas de un crimen, tendrán problemas de idioma para proporcionar descripciones precisas de los miembros de la banda, algo en lo que los criminales confían.

Las matrículas extranjeras son una pista instantánea para los ladrones, que también suelen utilizar coches ‘lanzadera’ para distraer a los agentes de policía de perseguir a sus colegas que cometieron un delito.