La crisis de sobredosis ha sido un tema de salud pública apremiante durante muchas décadas y ha cobrado la vida de más de 1,000,000 personas en Estados Unidos. Específicamente, los opioides han sido responsables de un impactante 72% de estas muertes. Especialmente al comienzo de la pandemia, hubo un aumento significativo en el número de muertes por sobredosis, pero se emprendieron muchos esfuerzos por parte de agencias federales y locales, hospitales y clínicas, y organizaciones comunitarias en respuesta a esto, y en 2023, Estados Unidos presenció una disminución en el número de muertes por sobredosis de drogas por primera vez desde 2018.
En los últimos años, el gobierno federal ha logrado avances significativos en el aumento del acceso a la buprenorfina, uno de los tres medicamentos utilizados para tratar el trastorno por uso de opioides (TUO). En primer lugar, durante la pandemia, la Administración de Control de Drogas anunció que la buprenorfina podía recetarse a través de telemedicina, en lugar de requerir una visita en persona, lo que aumentó significativamente el acceso para las personas que vivían lejos de un centro de atención médica o no podían visitar una clínica debido a las restricciones de bloqueo. Además, el gobierno federal facilitó a los médicos recetar buprenorfina al relajar primero los requisitos de capacitación de la exención X en abril de 2021 y luego eliminándolos por completo en diciembre de 2022.
Sin embargo, a pesar de estos cambios de política, un estudio reciente ha demostrado que el acceso a la buprenorfina no ha aumentado tanto como se anticipaba. En su investigación, el Dr. Gery Guy Jr. y su equipo en el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades y la Administración de Servicios de Abuso de Sustancias y Salud Mental exploraron los cambios en los patrones de dispensación de buprenorfina en farmacias antes y después de los cambios de política federales descritos. Los investigadores obtuvieron datos del IQVIA Total Patient Tracker, analizando datos de dispensación de buprenorfina para TUO de más de 56,000 farmacias de EE. UU. entre enero de 2018 y diciembre de 2023. Observaron cambios en los patrones de dispensación en tres momentos: marzo de 2020 (expansión de la telemedicina), abril de 2021 (requisitos de capacitación relajados para los proveedores) y diciembre de 2022 (la eliminación de exenciones de prescripción). Utilizaron análisis de series temporales para analizar los cambios en las tasas mensuales de dispensación, encontrando que aunque la tasa general de dispensación de buprenorfina aumentó de 2018 a 2023, la tasa de crecimiento de la dispensación disminuyó después de cada cambio de política consecutivo y la tasa de aumento fue menos pronunciada con cada nueva implementación de política.
Los autores del estudio sugirieron que esto podría indicar que si bien todos estos cambios de política federales son importantes y significativos, sus efectos se están debilitando con el tiempo y hay otras barreras que deben abordarse para resolver el problema del acceso a la buprenorfina. En primer lugar, todavía existe un estigma resonante en torno al TUO que a menudo impide que las personas busquen tratamiento en primer lugar. Abordar este estigma a través de estrategias como programas de educación comunitaria es crucial para fomentar conversaciones sobre este tema y asegurar que las personas estén al tanto de los recursos de tratamiento que existen en su comunidad.
En segundo lugar, muchos médicos han demostrado una renuencia en el uso de buprenorfina para tratar el TUO, describiendo desafíos en el proceso de reembolso, preocupaciones sobre el uso indebido de medicamentos y falta de apoyo institucional. Estas barreras deben abordarse mediante el desarrollo de programas de capacitación para médicos que aborden las preocupaciones de los médicos con la buprenorfina y también mediante la simplificación del proceso de reembolso y la eliminación de la carga administrativa que puede estar involucrada en el proceso de prescripción de buprenorfina. La integración generalizada del tratamiento con buprenorfina en la atención primaria también podría aumentar enormemente su accesibilidad y se ha demostrado que aumenta la retención en el tratamiento en estudios piloto.
En tercer lugar, incluso si una persona tiene acceso a un proveedor que puede recetar buprenorfina, muchos pacientes enfrentan barreras adicionales cuando las farmacias locales no almacenan adecuada o consistentemente el medicamento, lo que es especialmente desafiante para las personas que viven en áreas donde hay menos farmacias para empezar. Asegurar que las farmacias en todas las regiones del país tengan consistentemente stock de buprenorfina es clave para mantener el acceso al medicamento.
Estas son solo algunas de las muchas barreras que existen en varios niveles: paciente, médico y farmacia, que impiden que las personas accedan a la buprenorfina. El gobierno federal ha tomado medidas poderosas para aumentar el acceso al tratamiento con buprenorfina, pero ahora las comunidades, hospitales y farmacias deben hacer su parte. Si bien la disminución de las muertes por sobredosis de drogas en 2023 es prometedora y podría atribuirse en parte a los esfuerzos del gobierno federal, debemos ser conscientes de la gran cantidad de vidas que seguimos perdiendo cada año por sobredosis. El problema está lejos de resolverse y es imperativo que abordemos las otras barreras que actualmente existen en torno al tratamiento con buprenorfina para garantizar que las personas tengan acceso a la atención que necesitan.